La activista e intelectual cubana Anamely Ramos denunció que el opositor Virgilio Mantilla, apresado bajo la justificación de un supuesto “acaparamiento”, está sufriendo un rápido deterioro de su salud encarcelado en Camagüey.
“Virgilio Mantilla cumple una condena injusta de siete meses (…) Es un hombre honrado. Desde hace unos días su salud se agrava”, expresó Ramos, miembro del Movimiento San Isidro.
La también profesora y curadora de arte, explicó en un post de Facebook que a través de una amiga de Mantilla supo que “la última vez que llamó [Virgilio] su voz era como un hilo y que a ella se le apretó el pecho porque pensó: se nos está yendo”.
Ramos refiere que al opositor “lo amenazan constantemente para que no llame a sus antiguos amigos”. La activista, que recientemente habló en un foro del Parlamento Europeo a favor de la liberación de los más de 130 presos políticos del régimen, dijo que Mantilla “tiene varios padecimientos, entre ellos un estafilococo desde que entró a la prisión y del que no ha sido tratado. También tiene sacrolumbalgia, hongos, y mucha tos y dolor en los pulmones”.
Según Anamely Ramos, “la prisión en la que está, ha reportado unos cuantos pacientes de COVID y al parecer quisieron poner en la celda de Virgilio uno de estos convalecientes, por lo que Virgilio protestó y lo sacaron”.
La defensora de los derechos humanos pidió en la red social que “hagamos más visible, entre todos, la situación de Virgilio Mantilla. Si las cosas están mal en la las calles, siempre es mucho peor para los presos”.
¿Quién es Virgilio Mantilla, por qué está preso?
Virgilio Mantilla Arango cumplió dos meses de encierro en una cárcel cubana, a finales de febrero. Fue detenido en diciembre del 2020 y condenado a siete meses (bajo cargos falsos, según sus compañeros) por actividades contestatarias, entre ellas la “difusión del pensamiento del Apóstol José Martí”.
La reportera independiente Yunia Figueredo, colaboradora de ADN Cuba, entrevistó recientemente a la Dama de Blanco y activista por los derechos humanos Leticia Ramos Herrería, quien dio detalles de una conversación telefónica que sostuvo con Mantilla.
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“Gracias a Dios tuve la dicha de que mi hermano de lucha se pudiera comunicar conmigo. Me contó que lo tienen solo en una celda de la prisión de mayor rigor conocido como Kilo 8, continúa con varios problemas de salud, tiene infección en la garganta, muchos dolores en la columna y de la artritis que sufre que apenas le permite mantenerse en pie”, declaró.
Según la activista, Virgilio está sin medicamentos. “En la prisión le han dicho que allí no cuentan con medicinas para sus dolencias”, aseguró.
“También me alertó que, si en lo adelante notamos que no vuelve a comunicarse con sus hermanos de lucha, es porque lo llevaron a una celda de castigo. Dijo que está siendo amenazado constantemente por el mayor Juan Miguel, que es el jefe de esa prisión, un establecimiento diseñado para asesinos y delincuentes peligrosos”.
Virgilio Mantilla cuenta con casi 30 años militando en la oposición. Es miembro de la coalición unitaria Compromiso Democrático y residente en el poblado de Céspedes, provincia de Camagüey.
En diciembre comenzó a ser hostigado por la policía política, debido a sus acciones en la calle repartiendo papeles impresos con pensamientos de José Martí. En cambio, la policía lo acusó formalmente del delito de “acaparamiento”, según Figueredo un ardid utilizado por la Seguridad del Estado para condenar a los opositores bajo el manto de un delito común, y así no tener que enjuiciarlo en una causa política.
A su llegada a la prisión, Virgilio Mantilla mantuvo una huelga de hambre que debió suspender por problemas de salud.
