El abogado y periodista independiente Roberto Jesús Quiñones Haces, encarcelado desde el pasado 11 de septiembre en un centro penitenciario de Guantánamo, denunció al medio Cubanet en documento de su puño y letra, ser víctima de vejaciones y hostigamiento.
La carta de Quiñones, sacada clandestinamente de la prisión y dirigida al Jefe de Órganos de Prisiones del Ministerio del Interior, asegura que desde su reclusión es discriminado porque las autoridades “dicen que soy contrarrevolucionario”, motivo por el cual, asegura en su carta, “en un mes y 22 días solo me han permitido llamara a mi familia dos veces”.
El pasado viernes, las autoridades del penal provincial Combinado Sur negaron la vista mensual Quiñones Haces, declaró a Radio Televisión Martí su hijo Roberto José Quiñones Castro. "A mi mamá la llamaron a la casa y le dijeron que no iba a tener visita, de la noche a la mañana, sin ninguna razón. Ellos no dan explicación".
Según sus declaraciones en papel, la policía política de la prisión le prohibió hablar por teléfono durante un mes por publicar un artículo en Cubanet, además de que lo han humillado con revisiones constantes.
El abogado y periodista denuncia que en la cárcel de Guantánamo se violan constantemente sus derechos mínimos para el tratamiento de los reclusos, aprobada por la ONU en la década de los 50 del siglo pasado y ratificada por el gobierno del Partido Comunista cubano.
Quiñones Haces cumplió este 11 de noviembre dos meses en prisión. Después de haber sido condenado el pasado mes de agosto por el Tribunal Municipal de Guantánamo a un año de privación de libertad, por el supuesto delito de desacato y desobediencia al querer cubrir el juicio contra el matrimonio de pastores Ramón Rigal y Ayda Expósito, condenados a prisión por intentar educar a sus hijos en el hogar, el pasado 22 de abril.
El caso de Quiñones Haces ha provocado la reacción de personalidades y organizaciones internacionales, que han condenado la violencia y la manipulación de la justicia por parte de las autoridades cubanas.