El activista Héctor Pupo Quiala, quien es cuadripléjico y padece otras enfermedades, se plantó este 1 de enero en la entrada de Cayo Saetía, conocido como el retiro paradisíaco de Raúl Castro, en la provincia de Holguín en espera de ser atendido.
Pupo Quiala “Tiene problemas de la presión, tiene artrosis generalizada y bulto de enfermedades que el régimen no atiende, donde los funcionarios de Mayarí no lo atienden ni les importa”, afirmó su primo Pedro Quiala en una trasmisión en vivo por Facebook.
“No aguanta más, no hay ningún funcionario que se encargue de los enfermos en la isla, por eso él decide plantarse en la entrada del cayo donde se encuentra Raúl”, precisó Quiala.
La última noticia sobre su situación fue que estaba siendo vigilado, al sol, por la policía del régimen. Gracias a la información facilitada por Julio César Góngora a ADN Cuba sabemos que no ha ingerido alimentos ni se ha medicado y no lo hará hasta ser atendido.
El joven de 32 años pertenece al Movimiento Independiente Inclusivo y ha reiterado sus dolencias y la desatención que sufre por sus ideas políticas.
Fallecen opositores cubanos por desatenciones del régimen
En 2021 los opositores Pablo Moya Delá y Cristian Pérez Carmenate fallecieron por negligencias del sistema sanitario de la dictadura cubana.
Pérez Carmenate, coordinador y miembro de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), murió el 22 de agosto en Las Tunas tras meses de falta de medicación para el cáncer en los huesos que padecía.
“Otro crimen perpetrado por la dictadura Castro Canel comunista, víctima de torturas, brutales golpizas, injusticias, arbitrariedades, amenazas, negación de asistencia médica, y crueldades de todo tipo”, escribió Ana Belkis Ferrer García.
Pérez Carmenate, de 48 años, intentó obtener una visa humanitaria sin lograr éxito en la empresa.
En el caso de Moya Delá, este falleció el 26 de agosto tras adquirir una bacteria en el hospital Clínico Quirúrgico de Santiago de Cuba.
De acuerdo con su hijo Daineris Moya García, un clínico, de apellido Gallego, le confirmó que su padre había adquirido una bacteria en la sala 5B del hospital Clínico Quirúrgico.
A Moya Delá le habían otorgado recientemente la libertad extrapenal, luego de estar desde diciembre de 2020 recluido en la prisión de Boniato, en Santiago de Cuba, y haber realizado una huelga de hambre de 40 días aproximadamente.
Se encontraba desde inicios de agosto en el centro médico, para tratar las secuelas de la huelga de hambre y la falta de atención médica que padeció en prisión.
"Sabemos quiénes son los responsables y cuando llegue el momento tendrán que pagar por tantos crímenes cometidos, porque mi padre Pablo Moya Delá nunca debió ir a prisión. Familiares y amistades responsabilizamos al gobierno", concluyó Moya García.
Moya Delá fue detenido en octubre de 2020 en La Habana, por realizar una protesta pacífica donde exigía el cese de la represión y el abastecimiento en tiendas estatales de insumos de primera necesidad.