El cineasta cubano Lilo Vilaplana se encuentra rodando su nuevo largometraje Plantadas, que busca honrar a las mujeres víctimas del presidio político en Cuba que han sido invisibilizadas por la historia.
"Plantadas es una obra del corazón y una obra muy importante para honrar a las mujeres presas políticas víctimas del comunismo, porque el presidio político femenino no es pasado en Cuba, es presente y es una denuncia contra los crímenes del castrismo contra la mujer cubana y eso es importante que quede claro" declaró el director a ADN Cuba y revela que el rodaje en Miami "Ha sido una tarea titánica".
Según refiere Vilaplana, la película pertenece al género ficción, pero está inspirada en hechos reales.
"Se entrevistaron 26 presas políticas, se leyeron libros. Luego con Ángel Santiesteban, nos sentamos y elaboramos un guion a partir de esas entrevistas, a partir de los testimonios, anécdotas. No son personajes específicos. No es la vida de ninguna de las presas en particular, pero sí es la vida de todas ellas, que lo dieron todo por Cuba" declaró el cineasta.
Vilaplana resaltó que el líder anticastrista Reynol Rodríguez, fue quien ideó el proyecto y se dio a la tarea de recaudar los fondos y buscar apoyo en el exilio. Para la realización de la cinta se ha recibido el apoyo de muchas empresas y ciudadanos que apostaron por el largometraje, aunque Vilaplana pone énfasis en que esta entrega "no es la segunda parte de Plantados".
"Es una película distinta en todos los sentidos. Es la historia de tres mujeres que por diferentes motivos caen en las cárceles cubanas. Se recrea la época. Se recrean pasajes de la historia de Cuba y se explica un poco por qué estas mujeres van a prisión. Entonces Plantadas, como se va a llamar, es una película histórica y una película que pone en contexto por qué hombres y mujeres, en este caso mujeres, se enfrentaron al sistema comunista que impuso Castro en Cuba luego de traicionar a la Revolución" concluye.
Uno de los principales atractivos del filme es la escenografía, que estuvo a cargo de Daniel Botero, director de arte: "nuestro trabajo consistió en toda la escenografía, recrear esa cárcel de Cuba en los años 60, donde se desarrolla toda la historia de las presas políticas. Para crear toda esa sensación de realidad lo que usamos es el elemento que desgasta naturalmente un espacio como este, en este caso sería el agua".
Botero llama la atención sobre cómo "algo tan sencillo como el agua fue lo que nos permitió crear un espacio tan realista", pues el efecto visual se logró en apenas "un par de semanas" y consiguió "la sensación dehaber sido creado hace años y que durante esos años ha ido desgastándose y deteriorándose".