Bárbara Farrat Guillén, madre del joven Jonathan Torres, encarcelado por el régimen cubano tras las protestas del 11 de julio, comenzará el próximo 11 de diciembre una huelga de hambre y sed por la libertad de su hijo, declaró a ADN Cuba.
“Ya yo hice dos ayunos y nada he logrado hasta el momento, el 11 haré huelga de hambre y sed”, precisó Farrat, cuyo hijo, de 17 años, está encerrado en la Prisión de Menores Jóvenes de Occidente del Guatao, La Habana.
“Esta huelga va dirigida al gobierno cubano, para que reconozca que sí tiene presos políticos y menores de edad encarcelados desde julio, que no acepta la libertad de expresión y también va dirigida a los organismos internacionales, para que conozcan las violaciones de derechos humanos en Cuba”, declaró Orlando Torres, padre del menor.
Torres Farrat se encuentra preso desde el 13 de agosto. Ese día fue detenido por oficiales de la Policía Técnica de Investigación (PTI) con el argumento de que aparecía en un video lanzando una piedra a policías.
Con 17 años, Jonathan padece de hipertensión arterial por hipertrofia del ventrículo izquierdo y durante su presidio ha sufrido de otitis. A Jonathan, aún sin petición fiscal, le han negado en seis ocasiones un cambio de medida cautelar desde su detención, precisó a este medio la activista Salomé García.
El régimen tampoco le permitió inscribir al hijo de Jonathan, nacido al poco tiempo de ser recluido. Unos 14 menores de edad continúan detenidos a raíz de la oleada represiva desplegada por el régimen tras las protestas del 11 de julio, entre ellos Torres Farrat.
Desde esa fecha, agrupaciones defensoras de los derechos humanos de la sociedad civil cubana como Cubalex y Justicia 11J han documentado la detención de 45 menores de 18 años, de los cuales 29 han sido excarcelados, aunque nueve están en espera de juicio con medidas cautelares de libertad bajo fianza o reclusión domiciliaria.
El grupo colaborativo Justicia 11J, dedicado a seguir la situación legal de los reprimidos a raíz de las protestas del 11 de julio, acusa que con estas actuaciones el Estado cubano viola la Convención de los Derechos del Niño y otros tratados y cartas internacionales de las que es signatario.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) expresó el viernes su preocupación por las detenciones de niñas y niños en Cuba a raíz de las manifestaciones populares e instó al régimen de la isla a proporcionar información al respecto.
“Unicef está preocupado por los presuntos casos de detenciones de niños y niñas reportados en Cuba. Hacemos un llamado a las autoridades cubanas para que proporcionen información adicional verificada sobre niños y niñas presuntamente en esta situación”, escribió la agencia en sus canales de redes sociales.
“En todo el mundo, poner fin a la detención de niños y niñas es fundamental, incluso mediante reformas legales para elevar la edad de responsabilidad penal”, agregó.