Desde las alturas, donde vive junto a Franco y Ceaucescu, Fidel acompaña al pueblo cubano, para que no pierda el rumbo. Eso piensa el exministro de Cultura Abel Prieto, aunque, claro está, nunca mencionó los compañeros de viaje del comandante.
“A Fidel le debemos la formación a gran escala de médicos y enfermeros con una preparación profesional y una ética diferentes” —dice Abel Prieto—, la “heroica resistencia del pueblo contra las agresiones imperialistas” y todo lo “bueno” que le ha pasado a los cubanos en los últimos 62 años de logros y victorias.
“Nuestros enemigos quisieron asfixiarnos con el reforzamiento despiadado del bloqueo y de la guerra económica, y han logrado hacer muy difícil la vida cotidiana de la población. Pero no han podido quebrar la confianza de los cubanos en aquellos que nos dirigen, trabajando día y noche para que Cuba salga adelante, sin que nadie quede desamparado”, asegura Prieto.
También hace alusión al Movimiento San Isidro, al decir que algunos de los “proyectos imperialistas” para derrocar a la Revolución se han vestido con ropajes “artísticos” en el artículo que publica este 31 de diciembre el diario oficialista Granma bajo el título Vencedor de imposibles.
A su juicio, el Partido y el Gobierno —que son una sola cosa en Cuba, subordinada a Raúl Castro—, “han ganado más autoridad” este 2020, aunque su afirmación contrasta con las constantes críticas y hasta burlas que recibe de los cubanos.
1959 fue, según Cintio, “el año más hermoso, el decisivo de nuestra vida”. “Comenzaban otros combates; pero desde entonces el devenir tiene raíz, coherencia, identidad. (…) Y todo lo que parecía imposible, fue posible”, aseguró Prieto.