Denuncia: El gobierno lo desaloja y le da una casa en malas condiciones

José Ramón del Rosario Guerra, un residente del poblado La Bacanera, en Guantánamo, denunció a ADN Cuba que las autoridades cubanas le entregaron una casa mal construida.
José Ramón del Rosario Guerra
 

Reproduce este artículo

José Ramón del Rosario Guerra, un residente del poblado La Bacanera, en la provincia Guantánamo, denunció a ADN Cuba que las autoridades cubanas le entregaron una casa mal construida luego de obligarlo a desalojar su antiguo edificio en mejores condiciones.

“Dijeron que lo iban a demoler por problemas relacionados con el huracán Mathews y luego nos trajeron para acá. Pero este edificio tiene filtraciones y grietas; si sigue así en dos años me quedo sin casa”, denunció el hombre de 50 años.

Según Guerra, el edificio necesita una manta impermeabilizante que lo proteja de las lluvias, manta que nunca le fue colocada, a pesar de los ruegos de los vecinos al Gobierno y el Partido de la región.

Ahora quieren cobrarle 8000 pesos por ese mismo artefacto como si ya se hubiese colocado, algo que todos los residentes califican como una injusticia.

“Probablemente estén tapando a alguien, porque cuando nosotros llegamos aquí nos dijeron que la manta la ‘tomaron prestada’ para ponerla en otra edificación”, precisó Guerra.

“Otros edificios del Ministerio del Interior y de gente que trabaja en el turismo, esos sí tienen manta”, precisó.

Las políticas de construcción y reparación de viviendas en Cuba han sido ineficientes. Según estadísticas oficiales, el estado constructivo del 39% de las edificaciones de la Isla está clasificado malo o regular, y existe un déficit de casi un millón de inmuebles.

El régimen ha admitido que la vivienda es un problema no resuelto por la llamada “revolución”. Un reportaje publicado en 2019 en el portal oficialista Cubadebate reconoció que en el país existe un déficit habitacional ascendente a más de 1,3 millones de hogares.

Las viviendas terminadas en 2021 representan un 58% de cumplimiento del plan previsto, y un 39% de las casas terminadas en 2020, cuando se otorgaron cerca de 48 000 viviendas, según cifras oficiales.

Los últimos datos oficiales publicados por el gobierno cubano indican que el déficit de viviendas en la Isla era de 929 695. Las construcciones del Estado, por otra parte, no cubren la demanda anual.

La construcción de viviendas por cada 1000 habitantes ha disminuido en Cuba de 6,1 en 1989 a 3,6 en 2005. En 2006, se construyeron 111 400 nuevas unidades y la proporción subió a 9,9, ambos récords históricos.

Después de 2006, las cifras bajaron constantemente hasta llegar a 22 100 en 2016, mientras que la razón de unidades construidas por 1000 habitantes disminuyó de 9,9 a 1,9.

 

Relacionados