El popular humorista cubano Boncó Quiñongo pidió este 16 de julio a los artistas cubanos que salieran a la calle en apoyo de los manifestantes que se levantaron contra el gobierno de la isla.
“Si salen los artistas a la calle, no hay nadie que les pueda levantar la mano”, declaró el Señor de las Mil Sonrisas —como se le conoce en el mundo artístico— a ADN Cuba.
Si todos los artistas que se pronunciaron contra la represión se movilizaran junto al pueblo cubano, “otra vez se vuelva a calentar y a esos sí no hay quién los pare”, agregó.
Decenas de artistas cubanos y latinoamericanos se han pronunciado a favor de los manifestantes y contra la represión desatada esta semana en Cuba.
Entre ellos están Ricardo Arjona, John Travolta, Thalía, Carlos Varela, Adalberto Álvarez, Gloria Estefan, Aldo Roberto Rodríguez, Leoni Torres, Leo Brower, Armando Christian Pérez, más conocido como Pitbull, entre otros.
Las protestas comenzaron el domingo en San Antonio de los Baños, un pueblo ubicado en la provincia Artemisa (oeste) y se extendieron a más de 60 localidades del país.
Hasta el momento, el gobierno cubano reconoció la muerte de una persona, Diubis Laurencio Tejeda, de 36 años y residente en el municipio habanero Arroyo Naranjo, de quien no se dieron las causas del deceso en la nota oficial.
Sin embargo, medios independientes hablan de más muertos y heridos, información que no ha sido confirmada hasta el momento.
La ONG Cubalex, que da asesoría legal a defensores de derechos humanos, ya suma en su listado 380 detenidos y desaparecidos durante las protestas.
Organizaciones pro-derechos humanos como Human Rights Watch y Amnistía internacional condenaron la represión y tomaron partido por los manifestantes.
Washington declaró públicamente que la represión era inadmisible a poco de conocer la noticia del estallido social; este jueves, el presidente Joe Biden dijo que revisaría su política hacia Cuba a raíz de estos sucesos.
La víspera, el presidente Joe Biden prometió acceso gratuito para los cubanos a internet vía satélite, una medida que fue acogida con beneplácito por opositores y exiliados.