Próximo a los 17 meses del secuestro de dos médicos cubanos en Kenia, el gobierno cubano contactó, nuevamente, a las autoridades de ese país africano para saber en qué punto se encuentran los esfuerzos de rescate que se han estado anunciando por más de año y medio.
“Conversé telefónicamente con la canciller de Kenya, Raychelle Awour Omamo. Intercambiamos sobre la situación de nuestros médicos secuestrados en ese país”, dijo en un tuit el canciller Bruno Rodríguez.
“Pasamos revista al estado de las relaciones bilaterales y examinamos nuestra cooperación en los organismos internacionales” añadió.
Rodríguez no dio detalles de esa conversación pero analistas estiman que la publicación del tuit es también una necesidad de La Habana para dar entender de su preocupación por los médicos raptados, Assel Herrera y Landy Rodríguez.
Ambos fueron secuestrados violentamente el 12 de abril de 2019 en el condado fronterizo de Mandera y ese mismo día trasladados a Somalia, por bandidos presuntamente vinculados a la banda terrorista Al-Shaabab.
Desde su secuestro no ha habido un testimonio gráfico ni un audio que confirmen la supervivencia de los galenos cubanos.
Las autoridades cubanas han reiterado que Herrera y Rodríguez “se encontraban bien”.
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Medios de prensa de Kenia han reflejado declaraciones de ancianos de ambas partes de la frontera que coinciden en que los galenos están “dando atención médica” a los nativos de El-Adde, un poblado transformado en una base de reclutamiento de los terroristas.
Precisamente esa región ha sido testigo de la mayoría de los ataques aéreos del Comando África de Estados Unidos que esta semana cumplió su bombardeo número 45 desde que comenzó 2020 según comunicado de la misión estadounidense
A pesar de la negativa de Kenia de pagar un rescate por los galenos, no se descarta que el gobierno cubano pudiera estar realizando alguna presión para que ello ocurra, recordando el precio de su colaboración médica allí.
Mucha gente también se pregunta cual será el estado de salud de Rodríguez y Herrera bajo la amenaza de la pandemia del coronavirus en Somalia, en las condiciones de desprotección sanitaria que se supone ambos enfrentan.
De acuerdo con Hiiraan online, líderes de Al Shaabab han rechazado las medidas de contención y distanciamiento social y dicen a la gente que continúen asistiendo a las mezquitas abarrotadas y han mantenido abiertas las escuelas e instituciones islámicas en las áreas que controlan.
Al Shaabab ha creado un centro de aislamiento y tratamiento de COVID-19 en Jilib, al sur de Somalia, cercano a donde presuntamente pudieran estar los médicos cubanos, para atender a las personas con síntomas incluidos sus militantes, de acuerdo con Africa News.
En medio de este panorama de amenazas a la vida de los médicos cubanos, está programada el fin de las operaciones militares de la Misión de la Unión Africana, - que incluye a más de 3.000 soldados de Kenia- y de Estados Unidos en Somalia, para 2021.
En mayo pasado se logró la liberación por Al Shaabab de la trabajadora social Silvia Romano luego que servicios de inteligencia italianos establecieron negociaciones con los raptores con la colaboración de servicios secretos de Somalia y Turquía. Se especuló entonces que el el gobierno italiano hubo de pagar más de un millón de dólares por ese rescate.
