El poeta cubano Sigfredo Ariel, de 58 años, murió este domingo en La Habana víctima del cáncer, confirmaron amigos y colegas del autor, ganador de un premio David de Poesía en 1986 por su cuaderno Algunos pocos conocidos.
“Decir que ha fallecido uno de los mejores poetas de su generación no es suficiente, porque él era uno de los mejores poetas de la Cuba de hoy, uno de los de mejor oído, y de mayor compromiso con la escritura”, escribió en Facebook el escritor y dramaturgo Norge Espinosa.
Por su parte el periodista de temas culturales Michel Hernández aseguró que Sigfredo “no fue solo un excelente poeta sino un investigador a fondo de la música cubana. Con su obra entregó un abarcador testimonio del origen y la evolución de la creación musical del país”.
“Cronista de su tiempo, el legado que nos deja es indispensable para conocer y comprender la cultura de la Isla. Sigfredo mantuvo un diálogo con la realidad a través de una obra poética que no perdió el encanto y el rigor desde que se inició en estas lides hace más de tres décadas. Con su muerte Cuba pierde a uno de los principales referentes y renovadores de la generación de los 80 en la poesía ―en la que compartió méritos con otros notables poetas como Ramón Fernández Larrea― y a un intelectual cuya obra es de obligada consulta en el ámbito de la poesía, la música, el ensayo y la promoción cultural”, también apuntó Hernández.
“Su poema ‘La luz, bróder, la luz’ es uno de los documentos representativos de su obra y de las marcas más visibles del quehacer de su generación y de la poesía cubana contemporánea”, aseguró el periodista antes de citar un fragmento de dicha obra: “Y se borrarán los nombres y las fechas / y nuestros desatinos / y quedará la luz, bróder, la luz / y no otra cosa”.
Ariel recibió en dos ocasiones el Premio Nacional de Poesía Julián del Casal (1997 y 2004) y el Premio Nacional de la Crítica (2002 y 2006). Asimismo, mereció seis veces el premio Cubadisco por sus notas especializadas para diversas producciones cubanas.
Además, el artista cubano desarrolló una importante labor como ilustrador. Muchas de sus dibujos han aparecido en la reconocida revista Signos, creada en su Santa Clara natal.
Tras conocerse su muerte, numerosos amigos y personalidades de la cultura expresaron sus condolencias en las redes sociales.
El popular humorista Ulises Toirac reconoció que se encontraba “tristísimo” por la noticia. A Sigfredo Ariel “lo recuerdo con su pequeña estatura y sus ojos inteligentes, la picardía siempre a punta de labios y una frase mordaz eternamente en el gatillo. Un tipo con los que uno siempre quiere conversar”, señaló el actor.
“Nos queda esa imagen, chamaco, y tu poesía... y naturalmente, ‘tu luz, bróder, tu luz’”, aseguró Toirac.
