La empresa estadounidense Western Union suspendió este miércoles 26 de febrero los envíos de dinero a Cuba desde todos los países del mundo, salvo desde el territorio de Estados Unidos.
Según datos oficiales, las remesas enviadas a la Isla por los emigrados cubanos representan 6.600 millones de dólares. El 90 % del dinero procede de Estados Unidos, mientras que el 10 % restante, que se generaba en otros puntos geográficos, ha quedado bloqueado.
"Más difícil se hace todo ahora", se quejó una joven cubana entrevistada en La Habana por el youtuber Pedrito el Paketero. "Con la situación que se tenía antes [aun] recibiendo esas remesas ahora va a ser más complicado", dijo.
Varios encuestados en el Vedado habanero aseguraron que no recibían remesas y que no estarían afectados por ninguna de las medidas del Gobierno de Estados Unidos, que además de prohibir el envío de dinero a Cuba desde fuera de su territorio, ha restringido el monto trimestral a solo 1.000 dólares.
"Aquí los precios están disparados. Uno dice es una buena cantidad, pero 1.000 cada tres meses son 333 mensuales", se quejó otra joven cubana tras reconocer que muchas personas de la Isla que tenían familiares en España u otros países de Europa se verían "muy afectadas" por la medida.
"A lo mejor mañana todo mejora, a lo mejor empeora", dijo, sin atreverse a opinar sobre el camino que podría seguir el régimen cubano.
"Si tú tienes un familiar afuera y te quiere mandar 3.000 dólares porque te quieres comprar equis cosa y nada más puedes recibir 1.000 pesos entonces él tiene que buscar otra vía por donde enviarlo, ya sea una persona u otra forma. Ya es un inconveniente y descontento", dijo a Pedrito el Paketero otra habanera entrevistada en la Rampa.
Por su parte, uno de los encuestados aseguró que las restricciones impuestas a Western Union van a empeorar la situación económica cubana, que definió como "mala".
"Muchos familiares que tenemos en el exterior nos quieren ayudar mucho más y ahora no pueden", afirmó.
"Las ayudas del exterior le facilitan la vida a los cubanos… Imagínate que empiecen a poner trabas a las remesas. Vaya, me parece injusto", se quejó otra mujer en la céntrica calle 23.
Mientras tanto, otros entrevistados mantuvieron que no serán perjudicados por las medidas. "A mí no me afecta porque a nunca me iban a mandar esa cantidad de dinero. Pero las restricciones son absurdas, por supuesto, porque nos hacen daño. Ellos [el Gobierno de Estados Unidos] tendrán sus justificaciones pero, por supuesto que hacen daño. Afectan la economía del país y la de cada uno", concluyó otra mujer habanera.