Ni las colas donde se hacen listados y pasan las noches, ni los altos precios establecidos por el gobierno han podido detener a los holguineros en su empeño por conseguir un pasaporte.
“Yo vine ayer por la mañana y no pude hacer el trámite; sólo recogen 60 turnos y como puedes ver, aquí estamos más de cien personas para lo mismo”, comenta Ormercinda Esquivel. “Así que vine con mi marido desde la diez de la noche y tengo el número 20 en la lista, ya te puedes imaginar”.
Al respecto Midania Pérez confesó: “le di tres CUC (72.00CUP) a un borrachito que hace la cola durante la noche y espera hasta que llegues, de otra forma se hace muy difícil coger un turno bajito, tienes que dormir aquí, eso vale mucho más”.
Una anciana que se dedica al negocio de los turnos declara: “yo cobro 70 pesos (2.80 CUC) por hacer la cola. Aquí me quedo desde por la mañana que vendo los turnos hasta el otro día que viene la persona que me contrata; lo tengo que hacer porque la vida está muy dura y con la chequerita no me alcanza, así que no me da miedo. La policía siempre anda rondando, pero una ya tiene sus mañas”.
Resulta que en la cabecera provincial solo existen dos locaciones habilitadas por el departamento de emigración y extranjería para obtener documentos de identidad nacional, pasaportes y otros documentos legales.
“Hay 2 oficinas nada más: una en el reparto Peralta y otra en Tránsito, como a diez kilómetros del centro. Es un infierno; si te haces el bobo ni puedes sacar el carnet; hay mucha gente; dicen que en los municipios es mejor”, se queja Mario Olivares, quien lleva dos días tratando de obtener su carnet de identidad.
El infierno
Quienes aspiran a obtener sus documentos esperan ser atendidos apretados en un caluroso espacio desde las ocho hasta las once y media de la mañana. El público que llega a estas instalaciones es demasiado numeroso, lo que causa dificultades hasta a los propios trabajadores del departamento.
Una fuente que prefirió el anonimato comenta: “desde que llegas a las siete de la mañana encuentras esto lleno de personal y todos quieren resolver; vienen ancianos y mujeres embarazadas y con bebes y se les da atención preferencial y prioridad en la cola, pero este flujo ocasiona que se saturen las redes y colapse el sistema, por lo que hay demoras en los tramites”.
Por su parte, Pavel Santisteban conversa confesó a ADN Cuba: “mi niña tiene 9 meses y quiero hacerle su pasaporte. No tengo que hacer la cola pues los niños tienen prioridad. Lo que me molesta es que el precio de un pasaporte para una bebé sea igual que para un adulto, me parece demasiado”.
Es sabido que el pasaporte cubano resulta el más caro del mundo si se tiene en cuenta el salario promedio en el país.
“No estoy de acuerdo con que un pasaporte cueste 100 CUC (2500 CUP) en un país donde para ganar honradamente esa cantidad hay que trabajar 5 meses. Hay que prorrogarlo a los 2 años y son 20 CUC (500 CUP) y sólo se prorroga dos veces. Así que en cuatro años hay que sacarlo de nuevo. Si no le suben el precio”. Es el criterio de Eduardo Martínez, un trabajador de salud pública que desea hacer su documento para viajar.
No deja de asombrar la capacidad que tiene el régimen comunista para hacerles la vida difícil a las personas.