Este sábado 30 de julio se reportó un escape de gas en el hotel La Unión, ubicado en la ciudad de Cienfuegos, situación que, según las autoridades, se encuentra bajo control.
Según informó Leandro Manso Moya, jefe de seguridad y protección del complejo hotelero, la fuga fue descubierta en una comprobación rutinaria de consumo de gas, por lo que inmediatamente se procedió a activar “la brigada de protección contra incendios, como esta establecido en los planes, y se activa el plan de aviso establecido en las instalaciones hoteleras”.
Al momento de la evacuación la instalación, perteneciente a la cadena hotelera española Meliá, contaba con 85 huéspedes y el personal a cargo del servicio.
“Sobre las 7 y 30 am se detectó una fuga de gas en el hotel La Unión de Cienfuegos y de inmediato se activaron los protocolos de protección al personal que se encontraba en la instalación. Está controlada la situación y no hay daño alguno” publicó en su muro de Facebook Boris Luis García Cuartero, periodista oficialista que labora en Perlavisión.
El telecentro por su parte aseguró que el escape de gas había sido “controlado” y dijo que ofrecería “más detalles en breve”.
“En el lugar, el Cuerpo de Bomberos, las autoridades y la UEB División Territorial Comercializadora de Combustible para restablecer los servicios de la instalación con la mayor prontitud. Los 85 huéspedes se encuentran a buen recaudo” publicó en Facebook Perlavisión.
Ricardo Alonso González, director de la UEB Comercialización de Combustibles Cienfuegos, aseguró al periódico 5 de septiembre que “la fuga ocurrió debido a la falla de una de las válvulas de seguridad de la bala de GLP (Gas Licuado del Petróleo) instalada en el techo del Hotel, por lo que se procedió a la liberación de todo el gas que contenía la misma y a la posterior sustitución de la válvula defectuosa por otra nueva”.
Las fugas de gas son un elemento que pone en alerta al pueblo cubano desde el accidente ocurrido en La Habana el 6 de mayo del presente año. A consecuencia de la explosión del Hotel Saratoga resultaron lesionadas 99 personas y 47 fallecieron, según el Ministerio de Salud Pública de Cuba.
La catástrofe habría sido provocada por un escape de gas licuado cuando un camión cisterna recargaba con combustible un depósito del hotel, ubicado en pleno centro histórico de La Habana. A más de dos meses del desastre, no se han difundido resultados concluyentes de alguna investigación para esclarecer los hechos.
El establecimiento se encontraba cerrado desde hacía dos años a causa de la pandemia, pero en el momento del incidente, 51 trabajadores realizaban en su interior labores de preparación para su reapertura. Además de destruir gran parte de la instalación hotelera, la onda expansiva dañó una histórica iglesia bautista, así como 17 edificios colindantes y cercanos, algunos de ellos de viviendas y otros de instituciones como el centenario teatro Martí, inaugurado en 1884.
