El canciller cubano, Bruno Rodríguez, consideró este 7 de abril que la suspensión de la membresía de Rusia en el Consejo de Derechos Humanos (DDHH) de la ONU no favorecerá una solución pacífica del conflicto en Ucrania, y que Moscú fue una "víctima" de la hegemonía de Occidente.
“Suspensión de membresía de Rusia del Consejo de DDHH en nada favorece solución pacífica, negociada y duradera al conflicto en Ucrania. Hoy es Rusia, mañana podría ser cualquiera de nuestras naciones del Sur que no se pliegan a intereses de dominación y defienden su independencia”, escribió el jefe de la diplomacia cubana en Twitter.
Naciones Unidas votó este jueves a favor de suspender a Rusia de su puesto en el Consejo de Derechos Humanos por las acusaciones de crímenes de guerra cometidos por soldados rusos en Ucrania.
Aunque la medida fue aprobada con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones, recibió un apoyo significativamente menor en comparación con las dos resoluciones anteriores que la asamblea adoptó el mes pasado, en las cuales exigió un alto el fuego inmediato y la retirada de las fuerzas rusas de Ucrania.
En cuanto a América Latina, países como Bolivia, Cuba y Nicaragua se unieron a Bielorrusia, Corea del Norte, Irán y Siria para votar en contra de la expulsión. El régimen venezolano probablemente se habría sumado al "no", pero Caracas perdió el año pasado el derecho de voto en las Naciones Unidas tras no pagar las cuotas de la organización.
China se abstuvo de votar en las dos resoluciones anteriores contra Rusia, y esta vez votó en contra de suspender a Moscú del Consejo de Derechos Humanos.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, presentó la propuesta a principios de esta semana después de que las tropas rusas fueran acusadas de torturar y matar a civiles en la ciudad de Bucha mientras se retiraban de la capital, Kiev, una medida que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, calificó de "genocidio".
"Creemos que los miembros de las fuerzas rusas cometieron crímenes de guerra en Ucrania, y consideramos que Rusia debe rendir cuentas por ello. No podemos permitir que un Estado miembro que está subvirtiendo todos los principios que apreciamos siga formando parte del Consejo de Derechos Humanos de la ONU", expuso Thomas-Greenfield el lunes.
El martes, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, declaró que los miembros de la alianza colaboran con el Tribunal Penal Internacional de la ONU para investigar los crímenes de guerra rusos en Ucrania.
"Atacar y asesinar a civiles es un crimen de guerra. Deben establecerse todos los hechos para que los responsables de estas atrocidades sean llevados ante la justicia", explicó Stoltenberg.
Tras la votación, el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, agradeció vía Twitter a las naciones que votaron a favor de la expulsión de Rusia, al tiempo que recordó: "los criminales de guerra no tienen cabida en los órganos de la ONU destinados a proteger los derechos humanos".