El saltador de longitud Lester Lescay Gay abandonó la delegación deportiva de Cuba que participó en una gira de invierno en Europa, informaron este jueves fuentes oficiales.
Daniel Osorio, jefe técnico del atletismo cubano y entrenador del atleta fugado, confirmó al medio estatal JIT “que Lester Lescay abandonó el equipo a su regreso de una lid en Belgrado”, Serbia.
El saltador de altura Luis Enrique Zayas y el de longitud Maikel Vidal, “ya emprendieron el retorno a la isla para continuar aquí su preparación”, agregó JIT.
Lester Lescay (20 años/PB 8.28m) ganó esta semana el tercer lugar del Mitin Bajo Techo de Belgrado, con marca personal de 8,01 metros, aunque no fue suficiente para clasificar para el cercano Campeonato Mundial de Atletismo Bajo Techo, en la capital de Serbia.
El deportista, nacido en Santiago de Cuba (2001), es uno de los mejores saltadores que quedaban en la isla. Ganó medalla de plata en el Mundial de Atletismo para Cadetes en Nairobi, Kenia.
Además, es campeón de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018. En el último Mitin Atlético de Metz (Francia) quedó sexto.
A inicios de febrero pasado, otro saltador cubano, Jordan Díaz Fortún, fue declarado oficialmente atleta español tras publicarse su “nacionalidad española por carta de naturaleza” en el Boletín Oficial del Estado de España (BOE).
El habanero Díaz Fortún, de 20 años, es la mayor promesa mundial del triple salto. Ha sido campeón del mundo juvenil y Sub-20, además de coronarse en los Juegos de la Juventud.
Además, es medallista de plata en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y finalista del Mundial de Atletismo de Doha, en Qatar, ese mismo año. El joven cubano, que ahora compite por España, está entre los 10 primeros en el ranking de los mejores del mundo en el triple salto, según World Athletics. Su mejor marca personal es un salto de 17.49 metros.
Lea también
Al dar ese paso, Díaz Fortún renunció a los Juegos Olímpicos de Tokio. En una entrevista posterior, dijo que lo que más le dolía era la separación que representa el castigo de ocho años sin poder entrar a la isla que el gobierno impone a los “desertores”.
“Lo duro será que quizás no pueda ver a mi familia los próximos ocho años. Y eso, si los vuelvo a ver. Eso es lo duro. Porque solo tengo 20 años”, dijo a la prensa.
El triplista relató que quería ser español y para ello se apoyó en la atleta Ana Peleteiro, quien le sugirió a su propio manager para el proceso de solicitud de la nacionalidad por naturalización.
Foto de portada: Calixto N. Llanes/ JIT
