Una familia de cubanos fue captada por las cámaras de Más Televisión mientras intentaba cruzar el río Bravo en la frontera entre México y Estados Unidos para pedir asilo en el país norteamericano.
Los niños lloran mientras sus padres los obligan a entrar en el agua fría y meten sus ropas en bolsas de plástico. Uno de los pequeños fue arrastrado por la corriente, aunque pudo ser salvado por un integrante de la familia.
En la otra orilla los esperaban uniformados de Estados Unidos, quienes los subieron a sus vehículos y presumiblemente los llevaron a un centro de detención, comentó el periodista de la televisora mexicana.
Muchos cubanos han perdido la vida intentando cruzar el río Bravo que divide México de Estados Unidos. Cientos han muerto en su cruce por la selva del Darién, en la frontera entre Colombia y Panamá, que desde enero ha sido atravesada por más de 10 700 cubanos, según los datos del Servicio Nacional de Migración de Panamá.
La llegada de cubanos a Estados Unidos se había desacelerado a partir del 12 de enero de 2017 cuando el presidente Barack Obama anunció el cese de la política de “pies secos, pies mojados”, indicando que los inmigrantes cubanos serían tratados igual que los de otras nacionalidades.
Antes de esta fecha los cubanos que pusieran pie en suelo estadounidense podían permanecer en el país y solicitar la residencia permanente después de un año gracias a la Ley de Ajuste Cubano.
Sin embargo, en el actual año fiscal las cifras se han disparado, tanto de los que llegan por tierra como de los que intentan llegar por la vía marítima.
En febrero de 2021 tres cubanos fueron rescatados por integrantes del cuerpo de Bomberos y Protección Civil en coordinación con el grupo Beta y Cruz Roja, luego de permanecer más de cinco horas varados en un pequeño islote del Río Bravo, en la ciudad mexicana de Acuña, del estado Coahuila.
Según reportó Zócalo, el rescate se realizó en la tarde del 14 de febrero de 2021, cuando los migrantes intentaron cruzar de manera ilegal a los Estados Unidos, por la altura del fraccionamiento Las Alamedas.
Debido a la fuerte corriente del río Bravo, los cubanos se quedaron varados en el islote. Al ver que transcurría el tiempo y podrían morir de hipotermia decidieron gritar pidiendo auxilio, de acuerdo a la nota publicada en el citado medio local.