El lanzador cubano-alemán Enorbel Márquez dijo a la web de Swing Completo que a sus 47 años todavía esperaba jugar un Clásico Mundial con Alemania y retirarse en la Serie Nacional de la isla con su ex equipo de las Avispas de Santiago de Cuba.
“Quiero ayudar a Alemania en el torneo clasificatorio al Clásico Mundial de 2023, una tarea sumamente difícil pero tampoco imposible. Hemos visto como España e Israel han estado ya y nosotros hemos dado ya unos cuantos sustos en las eliminatorias anteriores”, dijo Márquez.
El pitcher, natural de San Luis, agregó que pese a su edad y lo cercano que estaría el retiro le gustaría despedirse de los diamantes desde el Guillermón Moncada. Aunque lleva más de una década alejado del béisbol cubano le gustaría manifestar el adiós del deporte activo desde su Santiago.
“Es un deseo que tengo de sentir de nuevo a mi afición santiaguera. Sería algo especial poder retirarme después de vivir otra vez esa experiencia”, añadió en conversación con el especialista Yaser Porto.
Márquez incursionó con la llamada “Aplanadora” de Higinio Vélez en los años 2000 donde consiguieron su tercera corona de manera consecutiva. Allí compartió line-up con lanzadores de la talla de Norge Luis Vera, Ormari Romero, Danny Betancourt, Wilson López y Osmel Cintra, además de relevistas como Jorge Tissert, Alexis Pagán y Rubén Rodríguez.
Lo más reciente del santiaguero en Alemania a nivel de selección fue en el Campeonato Europeo donde no consiguió la victoria, aunque apenas permitió dos carreras limpias. Pero su recorrido esta temporada en la liga teutona todavía le augura más años en activo.
Allí dejó balance de 3-1, 4 salvados y efectividad de 2,33 en la campaña regular, y luego en los playoff su marca mejoró a 4-1 y PCL de 1,24. Su desempeño en la final le valió el “MVP” sin demasiadas objeciones.