La Confederación Mundial de Béisbol y Softbol (WBSC) anunció los grupos y el calendario oficial para la IV Copa Mundial de Béisbol Sub-23, que se realizará en Taipei de China entre el 13 y el 23 de octubre de este año.
Cuba quedó ubicada en el grupo B del torneo, junto a Australia, Corea, México, Países Bajos y Puerto Rico, mientras que el apartado A se definió con Taipei de China, Colombia, Alemania, Japón, Sudáfrica y Venezuela.
El primer partido de Cuba se jugará el propio día 13 y será contra la selección de Puerto Rico, un equipo que, aunque ocupa el puesto número 16 en el ránking mundial, es una de las novenas tradicionales y con mucho talento en sus categorías inferiores.
El 14 los cubanos enfrentarán a Australia; el 16, a Corea del Sur; un día después, a Holanda, que en los últimos torneos se ha convertido en “la bestia negra” de Cuba; y cerrarán la fase clasificatoria contra México, que es el mejor elenco de Latinoamérica en estos momentos.
Clasifican a la siguiente fase, llamada “súper ronda”, los tres primeros equipos de cada grupo y el resto seguirá en acción en una “ronda de colocación”. En la súper ronda, se enfrentarán “todos contra todos”, los dos con más juegos ganados disputarán el título y los que terminen en los puestos 3 y 4 irán por el bronce.
Una de las novedades del torneo, según los organizadores, fue el reemplazo de China y Nicaragua por Puerto Rico y Colombia en la lista final de equipos participantes. Ello se debió a que China y Nicaragua continúan con restricciones por la Covid-19 y se negaron a competir.
En cada una de las cuatro ediciones anteriores de este evento, incluido un torneo Sub-21 en 2014, ha habido un ganador distinto. Taipei de China ganó el evento Sub-21, que fue el primero; la I Copa, en México, la ganó Japón en 2016; México derrotó a Japón en la final de la II Copa Mundial de Béisbol Sub-23, con sede en Barranquilla, Colombia, con Venezuela, que finalizó tercero; y en la Mundial los “morochos” se coronaron al derrotar a México en su propia casa, a la vez que Colombia venció a Cuba en el juego por el tercer lugar y obtuvo la medalla de bronce.
En esta III Copa Mundial, en Hermosillo, se fugaron 12 jugadores Sub-23 del equipo cubano, lo que se convirtió en la fuga más grande en la historia de la pelota cubana. Hoy muchos de esos deportistas se encuentran jugando béisbol profesional en Estados Unidos.