Estados Unidos ha puesto todas sus fuerzas económicas e institucionales para acabar con la pandemia del coronavirus. Este martes, el gobierno anunció que a partir del 19 de abril los adultos de cualquier edad podrán recibir la vacuna, mucho antes de lo previsto.
La causa de este adelanto es el elevado ritmo de vacunación que está alcanzando el país. La inmunización contra la temible pandemia lleva un promedio de 3.1 millones de vacunas por día. El pasado fin de semana se logró administrar la cifra récord de más de 4 millones de dosis en 24 horas.
Según Biden, para el 19 de abril, el 90% de los estadounidenses tendrían un centro a máximo cinco millas de sus casas; es por ello, que el número de farmacias incluidas en el programa federal de vacunación pasará de 17,000 a 40,000 en todo el país.
Este adelanto obligó a los estados a reorganizarse, en vista de que tenían previsto que la fecha para la administración de las vacunas para personas de 16 años en adelante fuera el 1 de mayo.
Vacunas hechas en el país en grandes cantidades
Una de las causas del éxito es que Estados Unidos cuenta con la ventaja de haber aprobado tres vacunas que se producen en el país. En diciembre, se dio luz verde a las de Pfizer y Moderna, que requieren dos dosis, y en febrero la de dosis única de Johnson&Johnson.
Y eso facilitó también los acuerdos con el gobierno. La administración de Donald Trump, entonces presidente, compró a final del año pasado millones de dosis antes incluso de que las vacunas de Moderna y Pfizer fueran aprobadas.
Ese adelanto hizo que una vez que recibieron la aprobación de las autoridades sanitarias, se aceleraran los procesos de distribución y que las farmacéuticas se dedicaran casi por entero a la producción de viales para su uso en Estados Unidos.
Moderna y Pfizer empezaron a fabricarlas antes de que terminaran los ensayos clínicos. Pero Estados Unidos no se queda ahí y aún se espera autorización para las vacunas de AstraZeneca y Novavax. De obtener el visto bueno, habría más vacunas disponibles y aumentaría el ritmo de vacunación.
La inmunidad de rebaño: objetivo primordial en 2021
Aunque el líder demócrata aprovechó en parte lo hecho por el gobierno de Trump, puso la vacunación masiva del país como meta principal en su agenda. El objetivo es disminuir a mínimos las muertes y los casos, para reactivar la economía.
Este 6 de abril, Biden dijo que el país había puesto 150 millones de dosis en sus 75 días de gobierno. Su meta inicial habían sido 100 millones en 100 días, ahora revisada al alza con 200 millones, número que podría superarse también si este ritmo se mantiene o se acelera.
En marzo, el demócrata logró que Johnson&Johnson y su rival Merck, el segundo productor de vacunas del mundo, fabricaran en conjunto el fármaco de la primera, sin importar rivalidades.
Originalmente el contrato de Johnson&Johnson por 1000 millones de dólares negociado el año pasado por el gobierno de Trump decía que la firma suministraría suficientes dosis para 87 millones de estadounidenses para final de mayo.
Sin embargo, J&J no cumplió con lo estipulado, por lo que el gobierno intervino. De ahí el acuerdo con Merck, que por ello recibirá financiación del gobierno. "Este es el tipo de colaboración entre empresas que vimos en la Segunda Guerra Mundial", comparó Biden.
Más vacunas, más sitios de vacunación
Otra de las claves es que las vacunas están disponibles en muchas partes. Para ello hay dos aspectos básicos: la producción y la distribución. En cuanto a la producción, los fabricantes de vacunas ponen cada vez más dosis a disposición de las autoridades.
Tras un inicio lento, Pfizer y Moderna han ganado experiencia y aumentado la producción haciendo incluso ellos mismos productos que necesitaban.
Pfizer, por ejemplo, recicla un filtro especial que requería en el proceso de producción, y Moderna recortó el tiempo de inspección y de empaquetado de los viales.
Según dijo Moderna al diario The Wall Street Journal, la firma necesitó tres meses para producir los primeros 20 millones de dosis y ahora está logrando 40 millones en un solo mes para Estados Unidos.
Pfizer pasó de producir cinco millones de vacunas semanales a 13 ahora. El gobierno espera que para final de mayo haya vacunas suficientes para todos los adultos del país.
En cuanto a la distribución, el gobierno federal tiene casi 30 megacentros de vacunación masiva en todo el país gestionados por la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), además de los que gestiona cada estado.
Miles de soldados están dando apoyo adicional en este tipo de instalaciones. Pero también se puede acudir a centros médicos, farmacias y hasta supermercados para recibir la dosis.
