El centro de detención de migrantes de Homestead comenzó el desalojo de más de mil 400 niños migrantes, con el fin de cumplir la normativa exigida por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE.UU en un comunicado el 3 de julio. La misma comenta la reducción del número de migrantes de 2,700 a tan solo 1,200.
Según informan medios oficiales los niños fueron reubicados debido a una onda tropical que amenaza La Florida, en horas de la noche sacaron a todos los niños quedando menos de 300 y aún se desconoce si se han mandado a otro centro de detención infantil o si están en Texas.
Esta medida fue criticada por organizaciones civiles y políticos teniendo en cuenta el trato brindando a los menores los cuale no cuentan con la compañía de un adulto. En un comunicado publicado por parte de la vocera del organismo federal, Evelyn Stauffer se indicó que “todos los UAC (niños extranjeros no acompañados) protegidos en las instalaciones de Homestead se han reunificados con un patrocinador apropiado o transferidos a una instalación autorizada por el estado dentro de la red de proveedores de atención de la ORR (Oficina de Reasentamiento de Refugiados) a partir del 3 de agosto de 2019″.
Entre los objetivos de la decisión está evitar el hacinamiento en las habitaciones ya que en los cuartos pequeños se ubicaban cerca de 12 niños. De igual manera se llegaban a colocar más de 200 niños de 17 años en pasillos con literas, espacios que se reducían al ancho de los hombros.
Por su parte, activistas locales se han mostrado consternados por la decisión, que también se les fue informado, fue dada por la amenaza de huracanes en la zona, sin embargo hasta el momento nadie ha confirmado el destino de los infantes o si al menos continúan en el Estado.
