El opositor cubano Ramón Arboláez llegó a Miami junto a su esposa y dos de sus hijos luego de una tortuosa travesía de años en la que su salud se ha deteriorado progresivamente como consecuencia de maltratos y un cáncer bucal no atendido.
Vivo por la mano de dios y al día a día. Llegué, casi sin vida, a la valla de visitantes. Cuando la patrulla fronteriza me cogió yo ya no tenía fuerzas, dijo Arboláez, de 45 años, ante los micrófonos de Telemundo mientras se disponía a salir del aeropuerto.
“Me siento muy contento por todo el apoyo que me han dado y a mi familia”, refirió con esfuerzo, dado el avance de su enfermedad desde inicios de 2020, cuando estaba en México e intentando llegar a Estados Unidos.
Opositor al régimen cubano desde los 90, Arboláez fue cofundador en Cuba, junto con Guillermo “Coco” Fariñas, del Foro Antitotalitario (FANTU) y ha sido un militante activo del movimiento por la libertad en la isla Cuba.
En 2016 escapó con su mujer y tres hijos a Trinidad y Tobago, donde sobrevivieron tres años sin documentación y “viviendo al margen de lo humano”, como refiere en su reporte la citada televisora.
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En 2019 iniciaron un angustioso recorrido por Venezuela y Colombia, como parte del cual debieron afrontar una travesía de cinco días por la selva del Darién para llegar a Panamá. De allí salieron para México, cruzando las fronteras de varias naciones centroamericanas.
“Ha sido muy maltratada mi familia en Trinidad y Tobago, en México también con amenazas de muerte”, dijo Arboláez, que logró solicitar asilo político el lunes pasado en un punto fronterizo de Arizona para después ser detenido durante cuatro días en Yuma.
Durante todo el itinerario recibieron varias amenazas y fueron perseguidos por la Seguridad del Estado de Cuba. Así lo afirma su esposa, quien fue liberada por ICE con un grillete y declaró que su mayor preocupación ahora es su hija, que se encuentra en México y está embarazada y a punto de parir, amenazada de muerte por ser hija de disidente.
Tras finalmente llegar a tierra amiga, el opositor buscará revertir el avance del cáncer que le fue detectado en julio y que “ya ha abarcado la mandíbula y parte los ganglios”, según explicó su cónyuge en una entrevista anterior. Ello, mientras su abogada presenta su defensa para intentar ganar el caso de asilo político en la Corte.
Familiares y amigos de Arboláez piden ayuda y colaboración de la comunidad cubana para afrontar los gastos médicos. El opositor se encuentra ingresado en el Jackson Memorial, donde espera tener un diagnóstico más exacto y un tratamiento que ayude a frenar la enfermedad.
