Libania Núñez Ricardo, actualmente activista por los Derechos Humanos, vive en el municipio Boyeros de La Habana con sus dos hijas menores de edad.
Ella compartió con ADN Cuba los problemas económicos que la llevaron a la prostitución, mientras quería estudiar para ser profesora y no se lo permitieron.
Actualmente es ama de casa y solo se dedica al cuidado de sus hijas, ya que al fallecer su madre tras un cáncer, tuvo que dejar el trabajo que tenía para cuidar a las niñas.
Además, ha sido amenazada por la Seguridad del Estado con quitarle a sus hijas por su activismo político y por haber practicado la prostitución, aunque esto ni siquiera es un delito en la isla, aunque es bastante perseguido.
"Tuve que prostituirme. No me siento bien pero no me quedó otra alternativa. Cuando hay juventud no hay experiencia y cuando hay experiencia no hay juventud. Todavía me siguen viendo como lo que yo fui", contó Núñez Ricardo.
Explicó que durante el tiempo que estuvo en la calle sufrió golpes y otros maltratos.
"Pasé mucho trabajo y estaba en la calle. No es la vida más fácil, es la más difícil de todas. Sufrí maltrato, golpes", añadió.
Por último, la mujer dijo que se ve en un futuro con sus hijos, que son lo más importante en su vida.