La ciudadana cubana de 94 años de edad, residente en el municipio Plaza de la Revolución, en La Habana, y diagnosticada como paciente de COVID-19 el pasado 21 de marzo fue dada de alta este martes 31 de marzo, informó el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) de Cuba.
Ese organismo estatal había señalado que la fuente de infección de la anciana había sido su propia hija, "quien arribó al país el 7 de marzo procedente de Madrid, España, y había presentado cuadro respiratorio leve el 10 de marzo".
Este miércoles, en el parte correspondiente al 31 de marzo, el MINSAP resaltó que la cubana de 94 años había sido dada de alta, tras recuperarse de la enfermedad.
De esa forma, la paciente de más edad reportada en Cuba desafió los pronósticos estadísticos, que aseguran como grupo etario más vulnerable a los ancianos, y venció la infección por COVID-19.
Este 1 de abril, las autoridades sanitarias cubanas confirmaron 26 nuevos casos de coronavirus en la Isla, lo que suma un total de 212 infectados.
Hasta el cierre de este martes, en Cuba se encuentran ingresados 2.742 pacientes, de ellos 1.140 casos sospechosos y 193 confirmados. Otras 26.278 personas se vigilan en sus hogares, desde la Atención Primaria de Salud.
Para COVID-19 se estudiaron 444 casos en la última jornada y resultaron 26 muestras positivas. Hasta ahora, el país acumula 2.766 muestras realizadas y 212 positivas.
De los 26 casos confirmados al cierre de este 31 de marzo, fueron diagnosticados 25 cubanos y un extranjero (España). De los 25 cubanos ocho tienen fuente de infección en el extranjero: Estados Unidos y México (3 cada uno), Chile y España (uno cada uno); 10 fueron contactos de casos confirmados y 7 fueron contactos de viajeros procedentes del exterior.
De los 212 pacientes diagnosticados con la enfermedad, 188 presentan evolución clínica estable. Se reportaron en total 12 altas médicas entre las que destaca la anciana de 94 años de edad.
Mientras, cuatro pacientes se mantienen en estado crítico y uno en estado grave.
Desde el pasado 24 de marzo, todas las personas que arriban al país son ingresadas durante 14 días en centros de vigilancia. Si en ese tiempo presentaran síntomas respiratorios, entonces son remitidos a los hospitales y centros de aislamiento, designados para estos casos.
El régimen de La Habana confirmó el pasado 11 de marzo los primeros casos positivos de infección de coronavirus en Cuba: tres turistas italianos de visita en la Isla.
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En el país han fallecido hasta el momento seis personas a causa de la COVID-19: un italiano, un ruso y cuatro cubanos.
Este martes, además, el primer ministro del régimen cubano, Manuel Marrero Cruz, anunció la suspensión total de los vuelos a la Isla, lo que significa que ni los cubanos y extranjeros residentes podrán entrar al país.
"El avance de la pandemia nos ha llevado a valorar la situación de los aeropuertos. Se ha tomado la decisión de suspender todos los vuelos de pasajeros a Cuba. Necesitamos eliminar el arribo de pasajeros que sigue siendo un riesgo para la salud de las personas", agregó el jerarca.
A nivel mundial se han confirmado más de 885.000 casos, con 44.000 fallecidos y 185.000 personas recuperadas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta 160 países con transmisión local de la enfermedad.