Una treintena de migrantes cubanos, ubicados en el territorio panameño de Los Planes de Gualaca, solicitará a la Oficina Nacional para la Atención de Refugiados (ONPAR) asilo político en el país centroamericanos, informó este lunes el diario La Prensa.
La noticia fue dada a conocer por el Servicio Nacional de Migración (SNM), luego de que las autoridades panameñas alertaran sobre el creciente número de indocumentados en la provincia de Darién.
Por el momento, sólo se sabe que los cubanos tendrán que llenar una solicitud de asilo para ser considerados por la ONPAR. En caso de que su petición sea aprobada, podrán “mantenerse en el territorio panameño bajo la condición de refugiados”.
Según el “Decreto Ley No. 3”, expedido en febrero de 2008, si se produce una “renuncia, cesación, revocación o pérdida de la condición” de apatriado, la ONPAR tendrá que notificar al SNM, quienes se encargarán de tomar las medidas pertinentes.
Desde hace varios meses, el flujo de migrantes que ingresan en Panamá desde diferentes localidades de América del Sur ha aumentado. El país centroamericano es considerado uno de los puntos de tránsito más importantes en la ruta de los indocumentados hacia su destino final: Estados Unidos.
Los cubanos, como otros migrantes, han tenido que realizar peligrosos recorridos, atravesando la selva de Darién. Los testimonios de los isleños son muchos y las vicisitudes, difíciles de imaginar.
Hasta abril, el SNM registró más de 560 detenciones a extranjeros en Panamá por tener un estatus migratorio irregular. De esa cifra, un total de 171 personas eran de nacionalidad cubana, siendo esta la mayor representación de arrestados. En marzo, las autoridades panameñas deportaron a 62 ciudadanos procedentes de la Isla.
