Los bateadores Jorge Soler y Adam Duvall conectaron jonrones para ayudar a los Bravos de Atlanta a ganar el primer juego de esta Serie Mundial, 6-2 sobre los Astros de Houston, en la casa de estos últimos en Minute Maid.
Sin embargo, la victoria fue costosa para Atlanta, ya que el lanzador Charlie Morton se perderá el resto de la final tras sufrir una fractura de peroné en un batazo del cubano Yuli Gurriel.
La ofensiva comenzó rápidamente contra Framber Valdez, cuando Jorge Soler conectó bambinazo como primer bate en su primera aparición en el Clásico de Otoño. El cubano se convirtió en el primer bateador designado en conectar un cuadrangular en el primer turno de su carrera en una Serie Mundial.
Soler es uno de los 20 jugadores latinos que están en los rosters de ambos equipos para este Clásico de Otoño. Y especialmente uno de los cinco cubanos, que representan a gran parte de la isla, pues hay desde jugadores habaneros, matanceros, villaclareños, espirituanos y de Las Tunas.
Los Bravos continuaron agregando en el tercer episodio. Eddie Rosario conectó un sencillo para comenzar la entrada y luego dio la vuelta para anotar cuando Adam Duvall conectó un jonrón en línea hacia la izquierda para poner el 5-0. Con esa ventaja era cuestión de tiempo para los de Atlanta.
Los de Atlanta hicieron la mayor parte de sus anotaciones al principio del partido, pero con una actuación dominante del pitcheo del bullpen que mantuvo a los Astros bajo control.
Ahora, perder a Morton es un gran golpe, pero Atlanta necesitaba ganar al menos uno de los dos juegos en Houston. Pudieron lograr eso y tendrán la oportunidad de reagruparse y descubrir cómo abordarán el resto de la serie, con la ausencia de su astro. Al menos ya cumplieron el cometido de ganar un choque fuera de casa.
