Las autoridades sanitarias de Honduras han iniciado 2020 con una campaña contra el dengue, enfermedad que dejó en 2019 al menos 178 muertos, una cifra nunca antes registrada en el país.
El dengue, incluido el del tipo clásico, afectó a más de 110.000 personas en el país centroamericano en el referido año.
"Podemos decir que la epidemia de 2019 ha sido la peor, un azote grande para el país”, dijo a EFE este viernes en Tegucigalpa la exministra de Salud Roxana Araujo.
De los 110.000 casos, unas 19.400 hasta la semana 51 fueron ingresadas con los signos de alarma y con dengue grave, agregó la exfuncionaria.
178 personas murieron a causa de la enfermedad, de las cuales la mayoría se suscitaron en menores de quince años, añadió.
La profesional de la medicina recordó que en octubre de 2018, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó a los países del continente sobre "una alta incidencia", inusual en los últimos tres meses del año, cuando "la historia natural de la enfermedad nos dice que hay un descenso de los casos" en ese período.
En julio, el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, declaró emergencia nacional, lo que según Araujo, contribuyó a que los casos de enfermos por dengue en 2019 no se duplicaran.
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La enfermedad es transmitida por el mosquito "Aedes aegypti", que prolifera ampliamente en la región centroamericana dadas las condiciones climáticas.
La campaña de control y prevención, que incluyó entre otras tareas la destrucción de criaderos del zancudo, limpieza de solares baldíos, depósitos de aguas estancadas y fumigación, fue coordinada por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
"Si no se hubiera hecho esa intervención, hubiéramos llegado a por lo menos 200.000 casos de dengue a nivel nacional" en 2019, expresó Araujo.
Las autoridades sanitarias del país centroamericano registraron en 2019 más de 200 muertes sospechosas por dengue grave, de las que 178 fueron confirmadas por pruebas de laboratorio.
De las 178 víctimas mortales, la mayoría eran menores de quince años, en un país de población joven, con 9,3 millones de habitantes.
En agosto de 2019, la OPS había contabilizado 2.029.342 casos de la enfermedad en Latinoamérica y el Caribe (casi 208 casos por cada 100.000 habitantes), de los cuales 723 se saldaron con la muerte de los pacientes.
Brasil, Colombia, Guatemala, Honduras o Nicaragua son algunos de los países más afectados por la extensión por el virus a través del "Aedes aegypti", que también transmite el zika y del chicunguña.