A un gorila adolescente se le ha reducido el tiempo frente a las pantallas después de que sus cuidadores notaran que se distraía con los teléfonos inteligentes de los visitantes, hasta el punto de que podría perjudicar su desarrollo.
Amare, un gorila macho de 16 años, vive con otros tres "solteros" en un recinto del zoológico Lincoln Park de Chicago.
Este macho de 188 kilos se encontraba a menudo sentado en la esquina del recinto más cercana a los visitantes, donde observaba fascinado las fotos y videos de sus teléfonos inteligentes que le mostraban a través del cristal.
A los responsables del zoológico les preocupaba que el tiempo que pasaba frente a las pantallas lo distrajeran demasiado después de que el animal no notara que uno de los otros gorilas adolescentes tuvo un ataque de agresividad contra él. La socialización es importante para...