Alejandro Quintero Morales, locutor y presentador de medios estatales cubanos, afirmó en Miami que no tiene “valor para seguir engañando” en la isla y por eso se lanzó a su travesía de migrante irregular hacia los Estados Unidos, desde Nicaragua.
“En un momento determinado [me] dije: ni una mentira más, yo no tengo valor para seguir engañando a mis vecinos”, confesó el exlocutor de la emisora oficial Radio Rebelde, en una entrevista publicada este jueves.
A una pregunta del reportero de Univision Javier Díaz, sobre cómo está “la situación” en Cuba, Quintana respondió que “el régimen sabe lo que está pasando, se está dando cuenta de lo que está pasando, pero no lo tiene en cuenta, no le importa”.
El joven de 26 años aceptó algunas de las críticas que le han hecho tras arribar esta semana al sur de la Florida. “Yo también tengo responsabilidad moral ante el pueblo, aunque yo haya sido presentador de programas culturales”, reconoció.
Sobre sus colegas de la isla, dijo: “Entiendo que haya muchos que tengan un miedo enorme, y entiendo que muchos, quizás, no tengan la oportunidad de salir y de poder respirar como yo”.
Alejandro Quintana, también actor, se desempeñó principalmente como presentador de espacios culturales en la radio y la televisión estatales. El nativo de Pinar del Río era conductor de los programas “Estaciones”, de Radio Rebelde, y “Maneras de hacer”, del Canal Educativo, entre otros espacios.
El comunicador confirmó el lunes su llegada a Miami. “Dios solo estaba escribiendo el guion de mi historia. Gracias, Estados Unidos de América por abrirme tus puertas”, expresó Quintana en su página profesional de Facebook, donde publicó su recibimiento familiar, con globos y banderas norteamericanas.
En otro post, esta vez en su perfil personal, el comunicador dijo estar “feliz” por emprender una nueva vida en Estados Unidos, el “país donde, por fin, me puedo sentir libre”.
“Dicen que ya estoy en la ciudad del Sol, que aquí puedo expresar lo que pienso sin tener que 'hablar bajito' y que es un lugar de unas playas hermosas y de gente valiente. No sé, yo aún me siento atrapado por la extraña mezcla de eso que todos llaman 'sentimientos encontrados'”, agregó.
En otra declaración en sus redes sociales, Quintana dijo ser “uno más de este éxodo masivo sin remedio y sin opciones. (…) Sí, soy uno más, porque mi historia se parece a la de muchos o tal vez a la de todos, pero no, tú sabes que nadie me regaló una visa, nadie me abrió las puertas de un avión ni tendió para mí una alfombra roja.
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“Sí, soy uno más de los que entregaron su arte en tus medios porque nunca me dejaron ver en ti algún otro. Sin embargo, sabes que no fui de los que engolaron la voz para convencer más, para imponer más ni para intimidar más”, agregó, aparentemente para poner distancia entre su trabajo y el de voceros de políticas gubernamentales.
En los últimos meses se ha hecho notable el éxodo de trabajadores de los medios estatales de comunicación, entre ellos la periodista y directora de programas informativos Yailén Insua Alarcón, que pidió asilo en Colombia; el conocido presentador y locutor de medios nacionales Frank Abel Gómez y el joven locutor, presentador de TV Camagüey e influencer Carlos Alejandro Sánchez Rodríguez, ambos en EEUU.
El caso más polémico es el del comentarista oficial Yunior Smith Rodríguez, quien renegó la semana pasada del régimen cubano tras servirle de vocero en varias campañas contra opositores pacíficos y a favor de la represión. El analista internacional y periodista de la estatal Televisión Cubana confirmó en sus redes sociales que estaba camino a la frontera de EEUU con México con el propósito de emigrar de manera permanente, porque se cansó del régimen y de “aquella mierda putrefacta”.
