En octubre de 2017 la Casa Blanca se iluminó de rosado en una tradición que se remonta al segundo mandato de George W. Bush. De igual manera se han proyectado las luces rosa, en su momento, sobre el Palacio de Planalto en Brasilia y 10th Downing Street de Londres. Que las casas de gobierno se sumen a la iniciativa del Mes de la Sensibilización contra el Cáncer de Mama, en una imagen así de contundente, mantienen la viva la esperanza del descubrimiento de nuevas maneras de entender la enfermedad, mejores fármacos y más vidas salvadas.
La campaña nació en 1985 como un esfuerzo colaborativo de la Academia Americana de Médicos de Familia, la farmacéutica AstraZeneca y muchos otros patrocinadores en un esfuerzo por visibilizar la necesidad de fondos para la investigación de este mal y estimular la detección temprana.
El impacto del Cáncer de Mama en la sociedad y en los sistemas de salud es de enormes proporciones. Mundialmente el Cáncer Mamario ocupa el segundo lugar en frecuencia luego del Cáncer de Pulmón y es la causa principal de muerte por cáncer de mujeres. Pero estas son solo estadísticas, números en una base de datos. Así pareciera un problema frío, más que la losa de mármol que muchas veces epiloga la historia de las mujeres con Cáncer de Mama.
Las historias humanas llenas de matices a veces describen más personalmente la realidad de este mal que está, a menudo, muy cerca de todos. Los hombres también pueden padecer Cáncer de Mama, pero son las mujeres quienes más lo padecen, abrumadoramente, y así se extiende su efecto sobre ellas, al matrimonio, a la familia, a la comunidad y al mundo.
Lea también
Es de importancia capital el diagnóstico precoz. Para eso las estrategias proactivas encaminadas a la detección temprana en mujeres sin síntomas ocupan un lugar prominente en el debate de la comunidad científica. Se ha llamado a este proceso Pesquisaje y se vale de métodos que van desde la consejería genética para determinar la presencia de genes BRAC1 y BRAC2— asociados al Cáncer de Mama—, Mamografía, Resonancia Magnética Nuclear, Ultrasonografía, Termografía, la Palpación manual por el médico hasta el Autoexamen de Mamas.
Aunque la utilidad de todos estos métodos está puesta en duda en la literatura científica— al no haber relación directa demostrada entre la técnica de pesquisaje y la reducción de la mortalidad—, sí se ha demostrado la disminución drástica de la mortalidad desde los años ochenta hasta la fecha. La aparente contradicción anterior se debe, probablemente, a la disminución del número de muertes debido a los avances en el tratamiento más que en las diferentes técnicas de detección precoz. El acceso al tratamiento oportuno, y por ende efectivo, pudiera estar mediado por la detección oportuna también.
El autoexamen de Mamas sigue siendo, a juicio del auto, un método valioso que solo requiere interés y un mínimo de entrenamiento, en contraste con otros más difíciles, caros o poco accesibles. Toda mujer en edad fértil y hasta los 75 años debe realizarse el autoexamen de mamas mensualmente. Sé que es adicionar algo más a la larga lista de tareas de quienes ya ejercen de Madres, esposas, amigas, económicas, nutricionistas, terapista, choferes, y hasta alquimistas de nuestras vidas, pero son así de importantes.
Que sigan volando las Alas por la Vida en Cuba, pero que vuelen también sobre la cúpula del Capitolio Nacional, que sea menos dorada y más de rosa, al menos durante el mes que ha elegido el mundo para sensibilizar a personas e instituciones sobre la importancia de combatir y prevenir el flagelo del Cáncer de Mama.