Daniuska Isaacs Sánchez, de 31, años vive en el poblado Salvador Rosales en Songo la Maya, Santiago de Cuba, es madre de tres 3 hijos, pero no tiene luz eléctrica.
Hace 5 meses se encuentra sin electricidad en su vivienda, ya que por las malas condiciones de su casa, esta se le derrumbó y tuvo que irse a vivir a casa de un familiar. Al volver le habían quitado el contador y el bajante de la electricidad.
Se ha quejado en las entidades pertinentes sin recibir respuesta: al gobierno local y a la Empresa Eléctrica.
"Yo me siento abandonada por el gobierno porque una cosa es la que dicen por el televisor y otra lo que estamos viviendo los cubanos de a pie", señaló Daniuska.
Por su parte la delegada del lugar dijo que no tenía los números telefónicos de funcionarios que pudieran resolver la problemática, "que ella no tenía nada que ver con eso".
“Estamos comiendo de lo que aparece y de lo que vende el Estado pero todo está bien Caro, cuando traen algo. Nosotros no sabemos qué hacer”, agregó.
Cuando llueve hay constantes filtraciones y debe levantar sus objetos en piedras y tablas.
Las imágenes grabadas por el equipo de ADN Cuba muestran el estado precario en que estas personas, incluidos menores de edad, están viviendo. No hay baño, el piso es de tierra y cocinan con leña.
Actualmente solo tiene en casa al mas pequeño de sus hijos, ya que los otros dos se encuentran en casa de su padre para poder ver las teleclases emitidas por la Televisión Cubana en medio de la pandemia de COVID-19.
En esa misma localidad también trascendió en marzo, que dos mujeres vivían en extrema pobreza durmiendo sobre un colchón de yerbas, luego de de haber sido afectadas por el huracán Sandy y no reciben subsidio alguno por parte del gobierno.
El 55% de los hogares cubanos recibe un ingreso de menos de 100 dólares al mes, de acuerdo con un informe que presentó en octubre pasado el Observatorio de Derechos Sociales, una iniciativa de Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) con sede en Madrid, España.
Añaden que cerca del 50 % de esos hogares se encontrarían por debajo de índice de pobreza, según los indicadores que establecen los organismos internacionales.
