Luis Wilber Aguilar, padre del joven Walnier Luis Aguilar Rivera sentenciado a 23 años de prisión por las manifestaciones del 11 de julio en La Habana, contó que la “jueza se echó a llorar” durante el juicio la semana pasada.
“A ver, pónganse de pie los acusados”, relató a Radio Televisión Martí. “Fulano de Tal, tantos [años]; Mengano de Tal, tantos […] Las madres llorando, gritando, los abogados también nos miraban… y entonces, cuando íbamos saliendo, la jueza también empezó a llorar, desesperada, sabiendo la injusticia que se estaba cometiendo ahí”, afirmó Luis Wilber Aguilar.
El juicio al joven manifestante de La Güinera se celebró la semana anterior en el Tribunal Municipal del municipio Diez de Octubre. Fueron sentenciados 17 personas por los hechos del 11 y 12 de julio. El jueves 23 de diciembre fueron dictadas las sentencias.
Los familiares de Walnier esperan una revisión del caso, tras la dura condena por el presunto delito de “sedición”. Luis Wilber Aguilar explicó que este martes una funcionaria del Departamento de Atención a la Población del Consejo de Estado le aseguró que tendrá una respuesta los primeros días de enero de 2022.
“Me dijeron que tiene unos cuantos beneficios porque en 21 años nunca ha ido a una prisión, nunca ha tenido nada [de conflictos con la ley]. Me dijo que iban a investigar todo eso y, en los primeros días de enero, me daban una respuesta”, dijo Luis Wilber Aguilar, quien aparece en un video viralizado en Navidad en el que reclamó justicia para su hijo.
El joven fue detenido el 18 de julio y se encuentra en el Combinado del Este. “Es un muchacho con problema mental y con certificado, con todos sus papeles médicos. Su papá esta ‘fajado’ ahora en estos momentos [en el Tribunal]. Prácticamente es más niño que adulto”, dijo su madre, Rosario Rivera, días antes al citado medio.
“Yo voy a esperar los primeros días de enero, que fue lo que me dijeron. Si yo, el 7 o el 8, no tengo respuesta, yo lo siento, pero tengo como cuatro o cinco [números de] teléfonos, y [familiares de presos] me han dicho: 'me avisas, porque ya no puedo aguantar más'”, afirmó el padre del joven Walnier Aguilar.
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Otro condenado a 23 años por manifestarse pacíficamente en La Güinera fue Ángel Serrano, de 54 años de edad.
“De 22 años, le subió a 23 años de privación de libertad. A nuestros familiares, que uno le dice ‘fueron tantos años’, se quedan ‘fríos’; todo el mundo expresa lo mismo: ‘¿eso qué cosa es?, eso es una locura”, declaró su hijo Henry Serrano Cabrera, a Radio Martí.
“Si [los abogados] no pudieron defender del todo es porque, cuando dieron el tiempo de receso, al nosotros entrar, nos enteramos de que a los abogados se les había pedido ‘que no hablaran mucho”, asegura.
El Directorio Democrático Cubano envió el 28 de diciembre una carta a la Relatoría del Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre Detenciones Arbitrarias, donde pide la aplicación del procedimiento especial “Acción Urgente” en favor de los detenidos por las protestas del verano pasado.
La “Acción Urgente”, según las regulaciones de Naciones Unidas, es aplicable a “los casos en que hay suficientes argumentos confiables de que una persona está siendo privada de su libertad sin evidencia creíble de delito y que la continuación de tal privación constituye una seria amenaza a la salud de esa persona, a su integridad física o psicológica o hasta de su vida”.
De acuerdo con el comunicado del Directorio Democrático, “en el caso de Cuba, las condiciones inhumanas de encarcelamiento han sido denunciadas, consistentemente y desde hace décadas, ante los organismos internacionales de derechos humanos y, en especial, ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas al que pertenece el Grupo de Detenciones Arbitrarias. El tratamiento a los presos en Cuba, especialmente a los presos políticos, ha sido típicamente cruel, inhumano y degradante”.
Foto de portada: Yamil Lage/ AFP
