El escritor nicaragüense y Premio Cervantes de Literatura de 2017, Sergio Ramírez, se unió a la solicitud virtual por la liberación de los presos políticos cubanos, según informó en su perfil de Facebook, el escritor cubano Enrique del Risco.
“El escritor nicaragüense y premio Cervantes de 2017 Sergio Ramírez suma su firma pidiendo libertad para los presos cubanos”, señaló del Risco.
Del Risco en conversación con ADN Cuba expresaba que la firma de Ramírez era especialmente significativa. “No solo por venir de una personalidad con su trayectoria y su reconocimiento al ser nombrado Premio Cervantes”, añadió.
Otras personalidades han firmado esta petición como Mario Vargas Llosa, Fernando Savater, Andy García, Steven Pinker, Tania Bruguera, Garry Kasparov o Mark Lilla.
“En el caso de Sergio Ramírez hay que destacar que ahora mismo pesa sobre él una orden de detención como parte de la represión lanzada por el gobierno de Ortega contra todos los que cuestionan su poder”, agregó el cubano.
“Que Sergio haya encontrado tiempo en medio de esta persecución para solidarizarse con los presos cubanos es especialmente reconfortante. Se trata en este caso de solidaridad entre víctimas de una persecución muy similar”, refirió.
El escritor cubano expresó que la solidaridad entre perseguidos debe servir de ejemplo, tanto para Nicaragua como para Cuba. “Nadie está a salvo de ser perseguido en algún momento así que toda solidaridad ante la opresión es a la larga un acto en defensa propia”, concluyó.
Recientemente Ramírez, declaró a la prensa española que Nicaragua ya estaba como Cuba y llegaba el momento del partido único. “La tendencia de Ortega es ir hacia el partido único, ya es un partido único porque estos partidos que acompañan a las elecciones son formaciones fabricadas por ellos mismos, son partidos fieles”, señaló.
Ramírez afirmó que eso era Cuba, pero con otro disfraz. “Cuba no es más que el Partido Comunista, y aquí (en Nicaragua), bien o mal, hay una serie de partiditos de mentira, pero el momento del partido único ya llegó”, concluyó.