Damián Yadiers Escanell Romero, ciego y padre de un niño al que le falta un riñón, es otro de los ciudadanos cubanos que reclama al régimen y muestra preocupación por la insuficiencia de las pensiones para afrontar los elevados costos que está suponiendo el ordenamiento monetario en Cuba y la inflación asociada.
Según escribió en la caja de comentarios del sitio web del programa castrista Mesa Redonda, la pensión que recibe por enfermedad no le permitirá tener y darle a su hijo una vida digna, y, al parecer, no contará con más ayuda de la asistencia social porque no consideran a su núcleo como uno vulnerable, precisamente por ya tener ese ingreso insuficiente.
El reclamo de Escanell Romero fue a modo de comentario y pregunta para la emisión del programa que tendrá lugar la tarde de este lunes y que, con la presencia del jefe de la Comisión de Implementación y Desarrollo de los Lineamientos, Marino Murillo Jorge, y la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó, abordará “detalles relativos al impacto de la Tarea Ordenamiento en la Asistencia Social y algunos servicios sociales”.
Planteó su caso para ver si los altos funcionarios vislumbran soluciones para las situaciones de mayor vulnerabilidad social que el llamado ordenamiento está provocando.
Soy ciego y vivo con mi niño, que tiene cinco años. Recibo de jubilación por enfermedad una chequera de 1528 pesos, detalló sobre su situación el afectado, residente en Guáimaro. Según contó en su queja, explicó su caso al presidente de la Asociación Nacional de Ciegos y Débiles Visuales (ANCI) de su municipio y al órgano de Trabajo Municipal, pero como única respuesta le dijeron que, aunque fueran dos personas en su núcleo familiar, él y su hijo no son vulnerables porque ya tienen una chequera.
Por tanto, “no me pueden ayudar”, lamentó Escanell Romero, que ponderó su preocupación en las afirmaciones de funcionarios del régimen que, al explicar los nuevos precios y cambios asociados al ordenamiento, subrayaron que la cantidad mínima indispensable de ingresos mensuales para un hogar de dos personas debía ser 2060 pesos.
“Yo conozco un matrimonio integrado por personas ciegas, que son de la provincia Granma, viven solos y ninguno de los dos trabaja y sí le brindan esa cantidad, sin embargo, yo que vivo con un niño pequeño, que por demás le falta un riñón, en mi municipio se niegan a ayudarme. yo pregunto: si ya aquí se negaron a brindarme esa ayuda, ¿adónde debo dirigirme? ¿qué debo hacer para que le den solución a mi caso?”, lamentó y cuestionó el afectado.
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Los jubilados y pensionados están siendo uno de los sectores más afectados por las medidas que ha tomado el régimen como parte de su proceso de unificación monetaria y cambiaria, llamado por el oficialismo como “Tarea Ordenamiento”.
La Tarea ha venido acompañada de incrementos de precios en los sectores público y privado, así como de las tarifas de servicios básicos y trámites legales. Ello, sumado a la inflación derivada del ajuste y la crisis de oferta en la isla, por la escasez y crisis crónicas de su sistema económico, ha hecho que los recientes aumentos de salarios y pensiones sean sólo nominales y estos sigan siendo insuficientes en la mayoría de los casos para afrontar el costo de la vida.
Este lunes también un pensionado denunció las diferencias que existen entre los salarios de los militares y las pensiones en la isla luego del inicio del ordenamiento, y pidió que los altos funcionarios den explicaciones al respecto y piensen en soluciones.
Sin identificarse con precisión en el mismo espacio donde Escanell Romero vertió su queja, quizás por temor a represalias o a que su inquietud no fuese publicada, el ciudadano escribió que “no es justo que haya salarios de varios miles en los organismos armados y otros y a los jubilados, que algunos son muy mayores y han sacrificado todo por su país, se les deje pensiones que no van a satisfacer sus necesidades”.
