Mailén Díaz Almaguer, la joven cubana que sobrevivió a la caída de un avión en La Habana en 2018, publicó este martes un mensaje que dedicó a las víctimas del incendio de la Base de Supertanqueros de Matanzas.
En un audio compartido en Facebook, Mailén se dirige a los afectados por la tragedia “con el ánimo de devolverle esperanza y fe a todo el que supera un obstáculo. Especialmente va dedicado a todas las víctimas del siniestro en Matanzas”.
“Nunca vamos a saber lo que la vida nos tiene preparado. En ocasiones podemos tener sueños, metas y hasta una vida organizada y planificada, pero los obstáculos surgen de la nada y muchas veces no te los esperas”, dice Mailén Díaz en la grabación, acompañada con imágenes de su vida.
Díaz Almaguer fue la única persona que sobrevivió a la caída de un Boeing 737-200 en La Habana, ocurrida el 18 de mayo de 2018. La nave, arrendada por Cubana de Aviación a una compañía mexicana, se precipitó pocos minutos después de despegar, con el saldo de 101 cubanos fallecidos, además de seis mexicanos de la tripulación y cinco pasajeros extranjeros.
“Yo diría a esas personas que están pasando por situaciones difíciles que no se rindan, que sigan ese sueño, ese propósito, ese objetivo, esa meta; que detrás de un túnel oscuro siempre hay una luz; que todo esfuerzo tiene una recompensa, que la vida es bella... ¡Vale la pena vivir!”, dijo Mailén Díaz en su mensaje.
Según el Ministerio de Salud Pública, 132 personas se lesionaron durante el incendio de grandes proporciones que comenzó el 5 de agosto de 2022 en la Base de Supertanqueros de Matanzas, donde ardieron durante más de 5 días varios tanques que almacenaban combustible tras el impacto de un rayo, según la versión oficial.
Las autoridades informaron que 17 heridos continúan hospitalizados. Hasta el momento, el gobierno solo ha confirmado la muerte de dos bomberos, y 14 personas están declaradas como “desaparecidas” en la zona del siniestro.
Entre los afectados también se encuentran familias que residían en los alrededores de la zona industrial y perdieron sus pertenencias. Diario de Cuba, por ejemplo, publicó la historia de Maykel Rodríguez Valerio, cuya vivienda se encontraba a 300 metros de la batería de tanques de combustible.
Aunque Rodríguez pudo salvar su vida y las de su esposa y dos hijos menores de edad, su hogar y todas sus pertenencias quedaron reducidos a cenizas. En similar situación se encuentra Yaridelkis Moreno Fornaris, una matancera de 27 años que, como Maykel Rodríguez, vivía en los alrededores de la zona incendiada y ahora se encuentra en un albergue del gobierno, según informó Diario de Cuba.