Este lunes llegaron al destino Cayo Coco, Ciego de Ávila, un total de 748 turistas extranjeros en tres vuelos.
Se trata de 500 turistas rusos, que aterrizaron en un Boing 777 de gran porte, de la aerolínea Azurair; y 248 canadienses tras dos vuelos procedentes de Toronto y Montreal.
Según reportó el medio oficialista Cubadebate, de esta forma reiniciaron las labores del turoperador ruso Anex Tours, suspendidas desde hace ocho meses debido a la pandemia de COVID-19.
La coordinadora general de la terminal aérea, Tamay Pérez, señaló que este es el segundo itinerario que reciben desde Rusia y lo hacen "cumpliendo con los protocolos de bioseguridad".
Datos oficiales indican que desde la reapertura de este polo turístico en septiembre, han recibido a unos 5700 viajeros rusos y canadienses.
Precisamente el viernes anterior, el Ministerio de Salud Pública (Minsap) anunció 11 casos de coronavirus que resultan ser ciudadanos de origen ruso. Especificaron entonces que eran "residentes en la isla" y se contagiaron por contacto con "extranjeros".
¿Qué hacen 11 rusos viviendo en Ciego de Ávila? Pues los 11 supuestamente son de allí; la provincia reportó 11 casos ese día y todos en el municipio Morón.
Sobre estos extranjeros quedó la sospecha de si son o no parte del vuelo que llegó la víspera a Cayo Coco procedente de Rusia, el primero de ese país que aterriza en el polo turístico cubano tras la reapertura.
La propia agencia de noticias del régimen, Prensa Latina, lo dio a conocer. Se trataba de un avión de la compañía Aigle Azur.
