El Observatorio Cubano de Conflictos calificó a Gladys Martínez Verdecia, primera secretaria del Partido Comunista de Cuba en Artemisa, como represora por su participación en los sucesos violentos que tuvieron lugar en el caserío Cepén, ubicado en el municipio de Bauta.
En una publicación realizada en Twitter, la organización le hizo saber a la dirigente del régimen que “participar o permitir la violencia tiene responsabilidad individual” y destacó que Martínez Verdecia “no impidió la represión policial en Cuba contra mujeres y niños en Artemisa” el pasado 29 de agosto.
En la descripción del caso, el proyecto Represores Cubanos explica que “Martínez Verdecia se personó en ese asentamiento irregular situado entre playa Baracoa y playa El Salado, cuando decenas de residentes fueron violentamente reprimidos por la Policía y la Brigada Especial del MININT, que intentaron impedir una salida del país en una o varias embarcaciones”.
La iniciativa civil denunció además que “los represores lanzaron perros contra los pobladores y los golpearon, incluyendo a mujeres y niños”, por lo que la acusan de ser cómplice “del abuso y violencia física” bajo el entendido de que represores no son solo aquellos individuos que cometen la acción, sino también aquellos que respaldan hechos de esa naturaleza.
Varios videos que se han vuelto virales en redes sociales, publicados este martes por el activista exiliado Alberto Fonseca Ortega (Albert Fonse, en Twitter), muestran a efectivos de la Brigada, conocidos como “boinas negras”, así como a otros agentes del Minint, arremetiendo a golpes y con perros contra grupos de personas en una vía cercana al Cepen y la playa El Salado.
“Primero los Guardafronteras les prohibieron la salida y tiraron tiros. Pero los habitantes siguieron insistiendo en escapar del país, y entonces les enviaron una Brigada Especial para reprimir con perros”, aseguró el activista Albert Fonse.
