“Este año ha sido una pesadilla. He tenido que ver el juicio amañado de mi hijo. Todo este tiempo ha sido de mucho sufrimiento”, declaró Liset Fonseca, madre de Rolando Ortega, condenado a 10 años de cárcel por romper un retrato de Fidel Castro durante las protestas del año pasado.
“Espero cada día una llamada y trato de ser fuerte para él, para mis nietos, siempre tratando en sus llamadas de decirle cosas agradables. Así quiera llorar mucho delante de él, nunca lo hago”, agregó Liset al hablar sobre su hijo.
Fonseca fue arrestado en julio de 2021 tras las protestas en San José de las Lajas, Artemisa, y procesado por los delitos de “atentado”, “desacato”, “instigación para delinquir” y “desorden público”.
En octubre, el Tribunal Municipal de San José de las Lajas condenó a Fonseca a 10 años de cárcel, según su hermano Alberto, como escarmiento por romper la imagen de Fidel.
Este lunes, Elienay Suárez, madre del preso político Maikiel Armando Peña Suárez, también recordó cómo ha sido su año desde que arrestaran a su hijo. “Seguiremos adelante, aunque como madre me cueste la vida”, dijo Suárez, desde la provincia Mayabeque.
Maikiel y otros manifestantes fueron juzgados por los delitos de sabotaje, desorden público y desacato entre el 13 y el 15 de diciembre. Fue condenado a 8 años de cárcel.
En el poblado de Vegas, donde reside el joven de 22 años, fueron arrestadas otras nueve personas tras las protestas masivas contra el gobierno.
El 11 de julio de 2021 miles de cubanos salieron a las calles durante la jornada de protestas antigubernamentales más importante en la historia del socialismo en la isla, según los expertos.
El régimen acalló la manifestación con violencia durante los días siguientes. Como resultado de la violencia, murió el joven Diubis Laurencio Tejeda, en el barrio habanero La Güinera, uno de los más combativos de la capital.
ONGs como Cubalex y Justicia 11J —creada a partir de los sucesos de ese día— cuantifican en varios miles los arrestados tras la rebelión.
Como escarmiento, el gobierno de Miguel Díaz-Canel impulsó juicios por delitos como “sedición”, que han sido calificados de farsa por especialistas en derecho y defensores de derechos humanos.
La ONG Cuban Prisoners Defenders (CPD) elevó el 8 de junio a 1046 la cifra de su registro sobre presos políticos en Cuba, la mayoría encarcelados tras la escalada represiva por las manifestaciones de julio de 2021, que se extendieron por más de 60 localidades de la isla.
Según la organización, 901 personas permanecen recluidas por dichas protestas, mientras que en el último año han pasado por las cárceles del país unos 1236 presos políticos.