Ante escasez de medicamentos, cubanos son víctimas de compuestos falsos

Autoridades médicas de Holguín advirtieron sobre compuestos con componentes tóxicos que pretenden ser Clordiazepóxido u otros medicamentos de prescripción habitual, pero escasos desde hace meses en Cuba
Clordiazepóxido falso
 

Reproduce este artículo

La escasez de medicamentos en Cuba, una de las tantas aristas de la crisis por la que atraviesa la isla, ha hecho que varios cubanos sean víctimas de productos y compuestos falsos, algunos incluso con componentes tóxicos, que simulan ser medicamentos de prescripción habitual.

Uno de ellos es el clordiazepóxido, agente ansiolítico recetado para aliviar la ansiedad, y que en el oriente del país se ha estado comercializando informalmente en una presentación falsa de 10 miligramos, detonante de reacciones adversas y episodios clínicos que motivaron una alerta por parte de las autoridades sanitarias locales.

Según advirtió la Dirección Provincial de Salud de Holguín recientemente, “se han detectado casos con reacciones adversas a un medicamento que ha estado circulando en la población y no procede de la red de farmacias”.

“El fármaco denominado Clordiaze Poxido (10mg) fue analizado en laboratorios y se comprobó que no es el ansiolítico comúnmente conocido por los cubanos como Clordiazepóxido. Como parte de las encuestas médicas, se conoció que el fármaco fue comercializado por viajeros internacionales… Reiteramos que, el medicamento tiene componentes tóxicos, por lo que se recomienda no consumirlo”, explicó la entidad médica.

En un post en Facebook de la oficialista Radio Angulo con la información y una foto del medicamento falso, varios cubanos manifestaron haber sido víctimas de efectos adversos de ese y otros compuestos adquiridos en el mercado negro.

“Mi mamá tomó el Nitrazepam de esa misma presentación y terminamos con ella en urgencias, se vio mal mal, siempre quise poder analizar el contenido de esa medicina, pero me fue imposible, me alegra que alguien lo analizara y divulgara esa información para que nadie vuelva a pasar por la que yo pasé”, expuso la usuaria identificada como Yanet Sarduy.

De manera similar, Mirta Cantallops narró que compró por 15 CUC un frasco igual al de la foto y que se lo llevaron de Holguín, diciéndole que procedían de Haití. “Estoy sin aliento por esa razón, mi vecina al tomarse una que le regalé me dijo que la puso muy mal”.

Muchos de los que comentaron el post coincidieron en que el caso evidencia por qué no se deben comprar medicamentes en la calle, aun cuando la escasez de los mismos en la red de farmacias deje poco margen a otras alternativas.

Asimismo, otros coincidieron en la importancia de no automedicarse y consultar con especialistas siempre antes de empezar a consumir cualquier medicamento que se consiga por vías “alternativas” y no haya sido recomendado o prescrito por el doctor.

 

Relacionados