Un cubano residente en el exterior ayudó a un anciano que fue multado con 8000 pesos en la isla, 320 dólares al cambio oficial, por vender ajo.
Del noble gesto, gracias al cual el afectado pudo pagar la sanción, dio cuenta en Facebook el usuario identificado como Yan Karlos Cansino, quien hizo llegar la ayuda monetaria. Según explicó, Diosdado Evaristo, el anciano, “recibió una ayuda desde fuera del país de una persona dolida”.
“Démosle gracias a Dios por esa persona y por que aún tenemos corazón, y que la maldad de estas personas que trabajan en dicha entidad que efectuó la multa no recaiga en sus sentimientos”, escribió Cansino en la referida red social, donde además comentó que el anciano multado “vive en pésimas condiciones” y “no es alcohólico”.
“Sólo estaba tratando de sobrevivir decentemente sin robarle a nadie, gracias a esa persona, la cual se preocupó desde fuera de Cuba y le hizo llenar el corazón de felicidad antes de dormir esta noche”, agregó Cansino en su post.
Este sábado volvió a acudir a Facebook para ahondar más en el caso, muestra, a su juicio, de la falta de sensibilidad de inspectores que multan a ancianos con enormes dificultades para sobrevivir y llegar a fin de mes.
Residente en la provincia oriental Las Tunas, una de las más pobres de Cuba, Cansino compartió un breve video que muestra a Diosdado Evaristo agradeciendo el gesto que tuvieron con él.
“Doy gracias a las personas que tuvieron ese gesto conmigo… No todo el mundo hace eso”, aseveró el anciano, que además explicó que no se dedica a nada indebido, pero que como se quedó sin trabajo debe estar “luchando”.
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La cuantía de la multa impuesta está amparada en el Decreto-Ley 30 de 2021, que entró en vigor a inicios del año corriente y permite a las autoridades imponer multas de entre 5 000 y 15 000 pesos a los sectores estatal y privado por violaciones de tarifas y precios.
Mediante esa normativa y otra relacionada con violaciones a las medidas sanitarias decretadas para contener la propagación de la pandemia de coronavirus el régimen ha recaudado millones de pesos, monto que se mofa de la necesidad y privaciones de muchos cubanos por la agudización de la escasez de alimentos y bienes de primera necesidad en la isla, así como por el alza indetenible de los precios.
