La oposición venezolana despidió este domingo en la favela de Petare (centro-norte), la más grande del país, al exconcejal y dirigente político Edmundo "Pipo" Rada, cuyo cuerpo sin vida y parcialmente calcinado fue hallado el pasado jueves en una carretera de Caracas.
Cientos de personas se concentraron cerca de las 10.00 horas locales (14.00 GMT), en un club social que Rada levantó en Petare para ofrecer ayudas a los pensionados del lugar, y desde allí exigieron justicia para el exconcejal, a quien también dieron el último adiós con cantos, bailes y piruetas en motocicletas, propias de los velatorios en las favelas de Caracas.
El jefe del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, a quien más de 50 países reconocen como presidente interino, acusó por el crimen al Gobierno de Nicolás Maduro -en el poder desde 2013-, y aseveró que Rada fue "masacrado".
"Esto es una practica de la dictadura (de Maduro): asesinar en sectores populares para generar miedo y para tratar de generar algún tipo de control social macabro", dijo a periodistas luego de asistir al velatorio.
"Se les salió de las manos su propio aparato de terror, su propio aparato represivo (...), tienen manchadas las manos de sangre no solo Maduro, sino todo el alto régimen", añadió.
Rada militaba en el partido Voluntad Popular, el mismo de Guaidó y del líder Leopoldo López, y hacía vida política en Petare, largamente considerado un bastión del chavismo.
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Pero este domingo ondeaban en muchas de las casas de la enorme favela las banderas de las agrupaciones opositoras como Voluntad Popular o Primero Justicia, del dos veces candidato a la presidencia Henrique Capriles.
Según las primeras versiones, la familia de Rada lo dio por desaparecido la mañana del pasado miércoles.
Su cuerpo fue hallado sin vida en una carretera de Caracas, parcialmente calcinado, con dos disparos en la nuca y con una bolsa en la cabeza que, cree Guaidó, tenía la función de proteger su rostro del fuego para que pudiera ser identificado por los cuerpos policiales.
Guaidó también comparó este caso con la muerte del exgobernador de Cojedes (centro) y exmilitante del chavismo, Jhonny Yáñez Rangel, quien fue encontrado asesinado y calcinado en un vehículo en una vía a las afueras de Caracas.
Asimismo, recordó que en el informe de la alta comisionada de DDHH, Michelle Bachelet, se reportó la existencia de un grupo para "exterminar en sectores populares", y que Human Rights Watch dio cuenta de 18.000 asesinatos extrajudiciales en el país.
Venezuela atraviesa por la mayor crisis de su historia moderna, con una marcada caída de la economía y el no reconocimiento mutuo entre el chavismo, que gobierna desde 1999, y la oposición agrupada bajo la figura de Guaidó, que en enero proclamó un Gobierno interino, pero sigue sin controlar las Fuerzas Armadas y la burocracia.