La célebre agrupación cubana “Buena Vista Social Club” celebra por estos días el aniversario 25 del álbum que relanzó la carrera de muchos de sus artistas y el son cubano, como género musical.
El disco se reedita actualmente en formato vinilo con abundante material adicional. Pero en 1996, la pretensión inicial de Nick Gold, dueño del sello World Circuit, y el músico y productor estadounidense Ry Cooder, era juntar a artistas cubanos con otros del oeste de África.
"Es a lo que yo me había comprometido en Londres con Nick, pero los africanos no pudieron llegar a La Habana por problemas de visado y entonces, con la ayuda de Juan de Marcos, se pusieron a buscar a otros músicos cubanos. Así se fueron sumando Compay Segundo, Ibrahim Ferrer, Cachao López, el Guajiro Mirabal, Omara Portuondo”, dijo al respecto el músico Eliades Ochoa.
El 17 de septiembre se lanzó una edición especial del legendario disco. Los productores Ry Cooder y Nick Gold volvieron a mirar las cintas originales, buscaron en el archivo y armaron un álbum remasterizado que tiene 12 pistas adicionales inéditas de las sesiones de grabación de 1996. También fotos que nunca se publicaron, un folleto de 64 páginas con la letra y las notas.
No todos los músicos de Buena Vista Social Club están vivos para vivir este 25 aniversario de su álbum. Compay Segundo murió en 2003 a la edad de 95 años, Ibrahim Ferrer murió a la edad de 78 en 2005 y Rubén González murió en 2003.
Todos ellos disfrutaron de carreras tardías. Ferrer incluso ganó un Grammy Latino en 2000 como mejor artista emergente, a los 73 años.
Luego de la salida del disco, Wim Wenders, un cineasta alemán, hizo un documental sobre los músicos famosos. Los filmó en entrevistas, durante sesiones de estudio en La Habana y en conciertos en el extranjero. Buena Vista Social Club estuvo mucho tiempo de gira después del éxito de ese álbum.