El gobierno de México enviará próximamente un buque de alimentos y medicinas al régimen cubano en momentos en que la isla atraviesa una de las peores crisis de su historia.
La agencia Reuters accedió a la información a través de una portavoz del gobierno de Veracruz, sitio desde donde zarparía la embarcación.
"En la mañana empezó la maniobra del cargamento de alimentos y medicinas por parte del gobierno de México hacia Cuba (...) en un barco de la Secretaría de Marina (Semar)", dijo a Reuters Marisa López, coordinadora de Comunicación Social de Veracruz según recogió el medio El Economista.
Además, ninguna fuente especificó el contenido de la carga ni el puerto cubano que la recepcionaría.
Reuters solicitó información al gobierno mexicano, a la Semar y a la Embajada de Cuba en México pero no obtuvo respuestas.
La solidaridad de López-Obrador llega tras las protestas que estremecieron a la isla el pasado domingo 11 de julio. El presidente mexicano comentó que “que su administración se solidarizaba con los ciudadanos de la isla y podría enviarles ayuda humanitaria si así se lo solicitaban. Además, abogó porque los cubanos encuentren una solución dialogada y pacífica tras las protestas y ha pedido el fin del embargo a la nación caribeña”, aclaró El Economista.
También México, como presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), dijo que apoyaría a Cuba con el envío de 800 mil jeringuillas para la vacunación, como han hecho otras naciones en el pasado.
Las limosnas del régimen tras las protestas del 11J
Tras el estallido social en toda Cuba, la dictadura cubana anunció una serie de medidas urgentes destinadas a liberar la presión social que lanzó a los cubanos a las calles.
La principal disposición es que, de manera “excepcional” autorizarán desde el 19 de julio que viajeros importen al país, en equipaje acompañante, medicamentos, alimentos y artículos de aseo, todo esto sin límite de valor de importación y “libre de pago de aranceles hasta el 31 de diciembre de 2021”.
Marrero Cruz explicó que estos productos “deben estar diferenciados del resto del equipaje”. Se exceptúan de estas medidas quienes lleguen al país por Cayo Coco y Varadero con motivos turísticos.
Sin embargo, con anterioridad a las protestas el gobierno cubano manifestó su rechazo a los pedidos de apertura de un corredor humanitario en la isla para hacer frente a la crisis sanitaria.
Según afirmó el director de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior, Ernesto Soberón, se trata de un concepto asociado a zonas en conflicto y no aplica a Cuba.
En conferencia de prensa desde el Centro de Prensa Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex), Soberón dijo que los pedidos de un corredor o una intervención humanitaria son llamados interesados que responden a “una campaña de desinformación que intenta confundir a nuestros connacionales en el exterior y a la opinión pública internacional”.
"Hay un interés genuino de cubanos en el exterior por contribuir a aliviar la actual situación en medio del impacto de la COVID-19, pero también se lleva a cabo una campaña en toda ley para presentar una imagen de caos que no se corresponde con la situación nacional", dijo el funcionario.
Soberón, según la oficialista Prensa Latina, alegó que el propósito es desacreditar a Cuba y la gestión del gobierno en la pandemia, obviando los esfuerzos de este por salvar vidas.