La reunión de Putin y Biden celebrada en Ginebra la víspera, generó mucha expectación, aunque los expertos aseguraron que las discrepancias entre ambos países eran muchas como para lograr acuerdos sustanciales.
Pero algo se avanzó en el mejoramiento de las tensas relaciones entre las potencias, si bien quedaron muchas cosas por resolver.
Puntos de encuentro
1. Embajadores y presos
Antes de la reunión, tanto Washington como Moscú habían señalado que sus relaciones diplomáticas estaban en su punto más bajo. Rusia de hecho acababa de incluir a Estados Unidos en su lista oficial de "países hostiles".
Pero tras la cumbre se acordó restituir a los embajadores en las respectivas capitales. Los diplomáticos habían sido llamados a consulta el pasado marzo, luego de que EE.UU. acusara a Rusia de interferir en las elecciones presidenciales de 2020.
El presidente Putin también habló de alcanzar un posible acuerdo para intercambiar prisioneros, asegurando que creía que ambas partes podían ceder.
2. Armas nucleares y ciberseguridad
Ambas partes acordaron iniciar un diálogo sobre el control de armas nucleares.
Biden expresó que Putin se había mostrado abierto a "ayudar" a Estados Unidos para que Irán no adquiriera armas nucleares, así como también se mostró abierto a ayudar a luchar contra el “resurgimiento del terrorismo” en Afganistán.
“A cambio, dijimos lo que queríamos hacer para brindar seguridad a la gente de Siria y Libia”, añadió Biden, quien insistió en la necesidad de establecer corredores humanos en territorio sirio porque “la gente está muriendo de hambre”.
Uno de los temas más contenciosos de la cumbre, sin embargo, fue el de la ciberseguridad. Y sobre ello se alcanzó una suerte de acuerdo, aunque no sin tensiones.
Los presidentes informaron de la conformación de un grupo de trabajo para desarrollar un entendimiento específico sobre los ataques cibernéticos y abordar la problemática según cada caso.
Estados Unidos sostiene que Rusia ha llevado a cabo un agresivo espionaje cibernético y que ha encubierto a criminales que han atacado infraestructura estadounidense y han reclamado rescates.
Sin embargo, el presidente Putin sugirió que la mayoría de los ataques en el ciberespacio provienen de EE.UU. y de otros países.
3. Relación personal
Había expectativa sobre cómo iban a tratarse los líderes y si se dirigirían ataques personales, especialmente luego de que Biden se mostrara de acuerdo en considerar a Putin como un "asesino" el pasado marzo.
Pero la realidad fue opuesta y los líderes manifestaron respeto mutuo tras el cierre de la cumbre. Putin calificó su relación con Biden como "pragmática" y halagó los valores del presidente.
"Es muy balanceado, justo como lo esperaba. Tiene mucha experiencia, te das cuenta a primera vista", continuó y concluyó que "es muy distinto a su predecesor", el expresidente Donald Trump.
El presidente Biden le regaló a su contraparte una escultura de cristal de un bisonte estadounidense, "uno de nuestros mamíferos más majestuosos y símbolo de fuerza, unidad y resiliencia", dijo en un comunicado.
También le obsequió un par de gafas de aviador hechas a medida, un modelo que el propio Biden usa con frecuencia.
Biden le regaló a Putin unas gafas de sol hechas a la medida, similares a las que él mismo utiliza.
Discrepancias
1. Disidencia y oposición
Cuando a Putin le preguntaron sobre las restricciones en las libertades políticas en Rusia, el mandatario ruso abordó el asalto al Capitolio de EE.UU. el pasado 6 de enero diciendo que no quería que ese tipo de caos se desatara en Rusia.
Sugirió así que EE.UU. estaba silenciando a disidentes, en referencia a los arrestos de sospechosos tras el ataque en el edificio del Congreso.
“Si hablamos de quién está matando a quién o encarcelando, la gente fue al Congreso de EE.UU. con exigencias políticas”, señaló.
Biden contestó desde su propia rueda de prensa a estas declaraciones y dijo que era una "comparación ridícula".
Por un lado, aseguró, que "había delincuentes" intentando tomar el Capitolio de su país. "En Rusia, hay personas intentando manifestarse de manera pacífica que no tienen permitido hablar libremente", dijo.
2. Navalny
No hubo señales de acuerdo con respecto al destino del líder opositor ruso Alexei Navalny, quien cumple una pena de prisión de dos años y medio, después de que un tribunal fallara que había violado las condiciones de una sentencia previa de cárcel suspendida.
El presidente Biden recalcó que habría "consecuencias devastadoras" para Rusia si Navalny moría en la cárcel.
Durante la conferencia de prensa de Putin, el mandatario se negó a referirse a Navalny por su nombre y lo culpó de su propio arresto, afirmando que había regresado a Rusia desde Alemania pese a saber que había una orden de detención en su contra.
Navalny sostiene que fue envenenado con un agente nervioso por órdenes de Putin, una acusación que este niega.
3. Ucrania
Ucrania fue otro de los asuntos de fricción entre Biden y Putin.
El líder ruso se mostró poco dispuesto a hacer concesiones sobre la creciente presencia militar de Rusia cerca de la frontera oriental de Ucrania.
Además, acusó a Kiev de romper los términos del acuerdo de alto el fuego con los rebeldes prorrusos del este de Ucrania.
Biden, por su parte, le dijo a Putin que Estados Unidos mantendrá su "compromiso inamovible con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania".
Las relaciones entre Washington y Moscú llevan años deteriorándose, especialmente tras la anexión rusa de Crimea en desafío a Ucrania en 2014, la intervención rusa en Siria en 2015 o las acusaciones de interferencia en las elecciones de 2016 que llevaron a Trump al poder en EE.UU.
Sin embargo, ambos mandatarios llegaron a un acuerdo en el asunto ucraniano: reavivar la vía diplomática, aunque Rusia dijo que lo que busca en ese país es "estabilidad".