El precio de la canasta básica subirá a tal punto cuando ocurra la unificación monetaria, que algunos cubanos en Sancti Spíritus estarán obligados a pedir un préstamo con tal de pagar los productos de primera necesidad.
Según declaró a medios locales Yudiana Alfonso, coordinadora de Programas y Objetivos en el Gobierno Provincial, las familias vulnerables, es decir, con bajos ingresos, “van a tener necesidad de un préstamo, de un anticipo para en los primeros días poder satisfacer sus necesidades sobre la base de la canasta básica que se formuló y que se va a tener en cuenta para el Día Cero”.
“También se ha ido trabajando con el sistema empresarial y presupuestado para organizar la nómina con el posible financiamiento de anticipo que se tiene que dar a los trabajadores, que está en el orden de los 1000 pesos, para que puedan enfrentar los primeros días hasta que llegue el salario, porque no todos los trabajadores cobran a principios de mes”, agregó.
Como es sabido, la unificación monetaria obligará a una devaluación del peso cubano en referencia al dólar estadounidense, lo que provocará una gran inflación. Las familias de escasos recursos sentirán duramente el golpe del aumento de los precios.
Por el momento, las autoridades espirituanas no dan cifras claras sobre cuáles productos dejarán de estar normados y cuáles subirán de precio. Según Alfonso, “se está trabajando” para definirlos, pero no dio detalles al periódico local Escambray.
“En el caso del sector cuentapropista, el Consejo de Gobierno tiene hoy aprobado un nivel de precios en los productos que mayor demanda la población. Nosotros también tendremos como referencia esos precios para que los trabajadores por cuenta propia no tengan un incremento sostenido de los precios en ese momento”, agregó.
Declaraciones como esta aparecen esporádicamente desde que el vicepresidente cubano Marino Murillo dijera en el programa Mesa Redonda que se acercaba el Día Cero, aunque sus declaraciones dejaron más dudas que certezas, pues evitó dar una fecha exacta para el comienzo de la unificación.
Varios economistas han dado sus opiniones sobre los efectos de la unificación; hay consenso en el hecho de que aumentará los precios, orillará a la bancarrota a muchas empresas estatales y golpeará a los pequeños propietarios. Sin embargo, coinciden en que el proceso es necesario.
En la isla circulan el peso cubano (CUP), con el que se pagan los salarios estatales y cuya tasa de cambio con el dólar es la oficial de uno por uno, y el peso convertible (CUC) que es equivalente al dólar y a 24 CUP en el mercado paralelo.
Esa medida es reclamada desde hace años por los economistas, como el ex ministro de Economía, José Luis Rodríguez, que la consideran como una vía para eliminar uno de los problemas de la economía cubana, pues provoca complicadas distorsiones en las cuentas estatales por las diferencias cambiarias.
El CUC comenzó a circular en la isla a partir de 2004 en sustitución del dólar, que durante 11 años se utilizó en la compra de bienes y servicios desde que fuera despenalizada su tenencia en 1993.
La dolarización de la economía cubana fue una de las medidas gubernamentales para sortear la dura crisis económica que los cubanos llaman Período Especial.
Desde noviembre último, el CUC, una moneda que hacía el papel de una divisa, dejó de ser aceptada en las compras que hacen los pasajeros en el aeropuerto internacional de La Habana. También algunas tiendas comenzaron, de manera experimental, a dar el cambio en CUP, cuando las personas adquieren bienes en CUC.
Medios independientes del exilio cubano aseguraron a mediados de este mes que el gobierno cubano fijará una tasa de cambio de 50 pesos por 1 dólar y nuevo salario mínimo, sin precisar las fuentes de esa información.
Según el portal Cibercuba, las autoridades económicas cubanas han celebrado discretas reuniones con funcionarios estatales para informarles sobre la "inminencia" de una reforma salarial y de la tasa cambiaria del peso cubano con respecto al dólar.
“Un vídeo en el que aparece Marino Murillo Jorge, jefe de la reforma económica, comentando ambas novedades con un grupo de expertos, está siendo exhibido discretamente a empleados del área económica y bancaria, a auditores, contadores y cooperativistas agropecuarios y de otros ámbitos”, aseguró ese medio.
En los años 80 del siglo pasado, la dualidad monetaria fue un fenómeno común en América Latina, cuando países de la región sufrieron de una aguda hiperinflación y, en consecuencia, se produjo una sustitución parcial, espontánea, de las monedas locales por el dólar.