El discóbolo Leonardo Díaz y el saltador de longitud, el guantanamero Leinier Savón consiguieron las primeras medallas para la delegación cubana en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020.
Savón Pineda (clase T12) dio a Cuba su primera medalla en los Paralímpicos y lo hizo al saltar 7,16 metros, un nuevo récord para el continente americano. Le aventajó solamente el iraní Amir Khosravani, quien consiguió el oro con salto de 7, 21, en el segundo intento. El bronce fue para el azerí, Said Najafzade con 7.03.
“Todo atleta quiere más y yo quería el oro, pero darle la primera medalla a Cuba me hace sentir muy feliz (…) Sabía que podía superar los siete metros y que con ello garantizaba medalla. Me estiré lo más que pude y ahí está el resultado. El iraní tiene buena técnica y mejor carrera de impulso. Creo seremos oponentes otra vez en París, en los próximos Juegos Paralímpicos”, dijo a la prensa deportiva el actual triple medallista paralímpico.
En esa misma competición, su compatriota Ángel Jiménez se lesionó el femoral derecho, pero con su único registro de 6,25 metros durante la lid quedó en el penúltimo puesto posible. Mientras Savón también agradecía el récord americano.
“No tenía idea de que hubiera implantado marca para América. En mi disfrute no me percaté de ello. Eso me hace doblemente feliz”, concluyó el también corredor de 100 y 200 metros planos.
En esa misma jornada, el cubano Leonardo Díaz consiguió la medalla de bronce en el lanzamiento del disco de la clase F56, mientras el jabalinista Guillermo Varona ocupaba el cuarto puesto entre atletas clasificados F46.
“Son cinco años trabajando para un desempeño superior, y aunque me alegra dar una medalla a mi país, reitero que trabajé para el oro (…) Y aunque siento que cumplí, realmente lance siempre buscando el oro”, dijo tras colgarse el metal bronceado.
En la jornada de este 30 de agosto debe debutar la estelar corredora cubana, Omara Durand en los 400 metros planos de la clase T12. En ella están puestas las esperanzas doradas de la delegación cubana.