Los mismos titulares de sus últimos combates volvieron a acompañar al legendario Yoel Romero tras su pleito en Las Vegas: “mereció mejor suerte”.
A punto de los 43 años, el pinareño parece haber perdido la última oportunidad de su vida de pelear por un título de Ultimate Fighting Championship (UFC), la mayor empresa de artes marciales mixtas en el mundo.
El nigeriano Israel Adesanya en la primera defensa de su titulo recibió un veredicto de decisión unánime, y mantiene un récord invicto de 19-0 (14 victorias por nocaut), una etiqueta atractiva para el negocio con rumbo a su posible próxima pelea con el brasileño Paulo Costa.
El pleito no fue digno cierre de una jornada donde minutos antes dos mujeres habían protagonizado uno de los mejores duelos entre damas en la historia de la UFC.
Con la mala experiencia de sus dos anteriores combates en los que no tuvo suerte con los jueces la mayoría opinaba que ante el campeón vigente Adesanya (30 años), Romero tendría que sacar una ventaja clara con varios derribos incluidos.
Este domingo las redes sociales se inundaron de las opiniones de los seguidores del cubano coincidentes en que la decisión debió recaer en el antillano que hizo más entre lo poco que se vio, al punto que la velada fue sellada por el abucheo generalizado tras los 25 minutos en el Octágono.
Con esos antecedentes Romero estaba obligado hasta buscar noquear a su escurridizo rival que sabía de la demoledora pegada de “El Soldado de Dios” como se autoproclama el cubano.
“Es imposible que vean ganar a un fantasma” dijo Romero a los periodistas
“Creo que la próxima vez me prepararé para hacer atletismo.Yo perdí todos los rounds porque él corría más que yo” ironizó Romero quien dejó entrever que no se jubilará a pesar de que económicamente su vida cambió tras ganar una demanda hace un año por más de 27 millones de dólares .
“Después de mi primer golpe en su ojo, echó a correr todo el tiempo” añadió.
Romero intentó responder a las críticas por su inactividad, incluida la del presidente de UFC, Dana White, quien recordó que al cubano se le dio esta oportunidad por el título que no le tocaba pues a última hora se lastimó Costa, y la desaprovechó.
“Fue una falta de respeto del supuesto gran campeón lo que acaba de hacer con la gente que trabaja mucho para pagar y ver esta pelea.” expresó Romero quien hizo un parétensis y bailó unos segundos ante los periodistas para demostrar su forma física. Adesanya había dicho que le había lastimado su pierna izquierda.
Pasada esta página de una pelea por el titulo para el olvido, Romero seguirá haciendo su historia como el más longevo en el encerado, y temido además, mientras el africano naturalizado neozelandés, tendrá que reconstruir su imagen con todo y su faja, por la exigencia del negocio.
Antes de desertar en Alemania en 2005 el cubano fue medallista de bronce (Winnipeg,1999) y oro (Santo Domingo 2003) en Juegos Panamericanos; dos medallas de bronce, dos medallas de plata y un oro (Ankara 1999) en Campeonatos Mundiales. En los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 logró el subcampeonato mientras en Atenas 2004 fue cuatro lugar.