El seleccionado cubano Sub-23 de béisbol terminó con medalla de plata el Panamericano de su categoría al caer con marcador de cuatro carreras a cero en la final frente a los locales de México.
Todo ello en medio de un escándalo por la deportación de dos de sus integrantes, que habían escapado de la delegación beisbolera cubana. La policía de México les dio caza como a delincuentes tras el aviso del régimen cubano.
El partido por el oro entre México y Cuba solo puso al descubierto los errores y desaciertos del cuadro criollo. Varios errores a la defensa y escaso bateo dieron al traste con las pretensiones de la selección, que nuevamente dejó a la isla sin un título.
“México vence 4-0 vs. Cuba en la final del PreMundial Sub-23 de Aguascalientes. Cuba clasificó al Mundial en octubre, a celebrarse en Taiwán. Los cubanos no ganan un torneo internacional desde el 2016 (5 años y 11 meses)”, precisó en Twitter al respecto el especialista Francys Romero.
Solo un cubano integró el equipo “Todos Estrellas” del Torneo. Se trató del center field granmense Francisco Venecia. También, el líder de los jonroneros, con tres, fue Javier Carabeo, de Mayabeque. Venecia no jugó la final por una lesión en el muslo que lo obligó a ausentarse.
Al término del choque, el manager del elenco, Armando Johnson, destacó en la prensa oficialista “la labor general de sus muchachos y reconoció que en el partido final fallaron la defensa y el bateo, fundamentalmente”. El cuadro de medallas del Panamericano quedó así: 1-México, 2-Cuba y 3-Nicaragua. Venezuela fue cuarto e igualmente clasificó al Mundial.
Finalmente, Andrys Pérez, capitán de la novena cubana, se mostró satisfecho por lo conseguido y expresó su confianza en “una gran actuación durante el próximo mundial”, que se celebrará en Taiwán en octubre próximo.