El béisbol cubano abrirá este sábado la 59ª Serie Nacional, la principal liga del país, con nuevas reglas y la recuperación del sistema competitivo según el cual los resultados conseguidos en la etapa preliminar se arrastran hasta la segunda fase del torneo.
Los equipos de la provincia oriental Las Tunas -el campeón vigente de la anterior SNB- y el de la central Villa Clara serán los encargados de iniciar la temporada del mayor espectáculo deportivo nacional.
Los 16 equipos convocados, 1 por cada provincia del país y uno del municipio Isla de la Juventud, jugarán un total de 45 partidos, de los que 21 serán en rol de visitante y 24 como anfitrión, en subseries de 3 juegos bajo el sistema de todos contra todos.
Los partidos de la Serie Nacional de Béisbol (SNB) se jugarán en 50 de los 168 municipios que tiene la isla caribeña, según los detalles informados este viernes por los organizadores en un congresillo técnico.
Los 4 mejores conjuntos avanzarán directamente a la segunda etapa del campeonato, mientras otros 2 saldrán de los juegos de "comodines" entre los restantes 4 elencos.
El quinto clasificado se medirá al octavo y el sexto al séptimo, en un play off (fase final) de tres enfrentamientos.
Entre las novedades del próximo campeonato se contempla que, en el caso de que no se celebre un encuentro en la jornada programada, al día siguiente se realizará un doble choque de siete entradas cada uno.
El jefe de reglas y arbitrajes de la Dirección Nacional de Béisbol, Luis Daniel del Risco, precisó que cuando se decrete una base por bola intencional, la bola "es muerta".
Además indicó que las jugadas de interferencia y obstrucción decretadas por los árbitros son de "apreciación" y señaló que el lanzador solo podrá batear o correr por el bateador designado y en caso de que el bateador designado resulte expulsado, entonces actuará el lanzador.
La Dirección Nacional del Béisbol cubano - encabezada por Yovany Aragón- también avanzó que los jugadores integrantes del equipo de Cuba que compitió en los Juegos Panamericanos de Lima, se incorporarán a sus respectivos conjuntos en la tercera subserie del campeonato.
La actuación del béisbol cubano -que desde hace varios años muestra un evidente declive en las competencias internacionales- protagonizó en esta edición su peor actuación en los Juegos Panamericanos, según evaluaron comentaristas deportivos de la isla.
La selección isleña sufrió en Lima dos fracasos en igual cantidad de salidas -uno de ellos al debutar frente a Colombia en un partido que cerró 1-6- y quedó sin opción para disputar medallas al caer ante el equipo de Canadá por 8 a 6.
En los últimos meses, el béisbol -el deporte con más seguidores en Cuba- también ha vuelto a sufrir la pérdida de varios jugadores que han optado por abandonar la isla en busca de su inserción en las Grandes Ligas profesionales de Estados Unidos.
Las autoridades deportivas cubanas culpan de esas deserciones al gobierno de Estados Unidos por haber cancelado el acuerdo al que habían llegado la Federación de la isla y las Grandes Ligas en diciembre del 2018, y consideran que esa medida es un "estímulo" al tráfico de jugadores de béisbol cubanos.
El acuerdo entre la FCB y las MLB se negoció durante tres años y buscaba ofrecer una vía "segura" a los peloteros del país caribeño que pudieran jugar bajo contratos en los 30 equipos profesionales estadounidenses sin perder la residencia en Cuba.
El pacto fue recibido con beneplácito y como la manera de poner fin al éxodo de jóvenes talentos del béisbol cubano, pero en abril pasado la administración del presidente estadounidense Donald Trump comunicó a las MLB que había decidido anular la disposición aprobada durante el mandato del expresidente Barack Obama (2009-2017), la cual permitía a las Grandes Ligas contratar a los peloteros cubanos.
