Ante el temor de un equipo “Cuba independiente” de béisbol, Miguel Díaz-Canel, presidente del régimen cubano, movió sus piezas y comprometió con esta visita al italiano a Riccardo Fraccari, titular de la Confederación Mundial de Beisbol y Softbol (WBSC, por sus siglas en inglés).
Según los medios del oficialismo, Canel “agradeció” al italiano por su apoyo a la pelota cubana. Por su parte, Fraccari subrayó “el carácter histórico del béisbol en Cuba y la necesidad de retomar su brillantez”.
“Se ve que está al tanto de lo que está pasando, está interesado porque el béisbol es patrimonio de este país, entonces estoy muy contento de este encuentro”, dijo el italiano en un tuit de la presidencia, sobre su encuentro con el dirigente.
Fraccari puede frenar la asistencia de un “Cuba independiente” al Clásico Mundial, y así lo ha dejado claro en sus últimas declaraciones. Con este “encuentro”, el dirigente del béisbol mundial se compromete mucho más a favorecer los intereses del régimen.
“El Presidente es un amante del béisbol. Fue un encuentro muy amistoso, en particular porque hablamos de cosas que nos unen en el béisbol”, comentó Fraccari sobre su cercanía con el dictador Canel.
Esta es la segunda ocasión en un año que el italiano visita Cuba. A mediados de enero estuvo allí con el objetivo de cerrar un acuerdo entre la Federación Cubana y la empresa de San Marino, TeamMate, especializada en medios e implementos para jugar béisbol.
Además, Fraccari evaluó personalmente las posibilidades de Cuba para acoger eventos internacionales y la futura creación de una academia cubana del béisbol, con auspicio de la Confederación Mundial.
A inicios de abril, el dirigente del béisbol mundial señaló públicamente su desacuerdo con la iniciativa de una Asociación Cubana de Peloteros Profesionales que intente representar a Cuba en eventos internacionales.
“Las únicas entidades que pueden organizar un equipo nacional con los colores, la bandera, el nombre, son las Federaciones Nacionales en cualquier evento de la WBSC”, declaró el directivo a los seguidores de la pelota cubana.