El comentarista deportivo cubano Modesto Agüero dijo en redes sociales que, de saber que a los boxeadores cubanos se les daría la oportunidad de profesionalizarse, no se hubiera retirado, para tener la oportunidad de narrar las peleas.
"Si llego a saber esto, no me retiro para narrar a los boxeadores cubanos peleando como profesionales", respondió Agüero a un post de Twitter de Daniel de Malas, director del sitio Swing Completo.
"Pero de veras me sorprendió que aprobaran que los púgiles cubanos pelearan como profesionales", añadió el célebre narrador deportivo.
Al final, reconoció que su comentario fue una broma: "Lo de no haberme retirado no era real. Estoy muy feliz viviendo aquí".
Agüero vive hace varios años en Fuenlabrada, Madrid, junto a su familia.
Ante la ola de fugas de boxeadores cubanos, como recientemente sucedió en el Panamericano de Guayaquil, el régimen anunció que sus atletas de esa disciplina se insertarán en circuitos profesionales, entre otras razones, para "sumar otra fuente de ingreso".
El vicepresidente del Inder, Ariel Sainz Rodríguez, confirmó en el espacio oficialista Mesa Redonda que el boxeo cubano incursionará en circuitos profesionales, buscando “sumar otra fuente de ingresos que beneficiará a los atletas y miembros de los colectivos técnicos, y sus familias, y el desarrollo de este deporte”.
La Federación Cubana de Boxeo se quedará con el 20% del contrato de los boxeadores para “el desarrollo de la base”. Se agregó que los ingresos serán mayoritariamente destinados a los atletas y también beneficiarán a entrenadores y personal médico.
Inicialmente, cuatro atletas firmarán por tres años, con bonificaciones económicas adicionales, pero Sainz dejó claro que otros miembros del equipo élite y alumnos de las academias provinciales estarán aptos para responder a otras competiciones. Además, la Federación Cubana de Boxeo tendrá la potestad de responder a cada demanda: quién pelea, dónde y contra quién.
El directivo agregó que esto sería un “ajuste a la política de estimulación y categorización imperantes en el país”, y precisó que también se tuvo en cuenta “un contexto internacional signado por las puertas abiertas del olimpismo a los peleadores rentados”.
El régimen cubano, que siempre ha criticado el boxeo profesional, donde brillan numerosos atletas del país, como Yordenis Ugás, ahora señala que las reglas de las organizaciones se han “humanizado” y hay “garantías asignadas” al cuidado de los atletas de la isla.
Para ocultar los verdaderos objetivos de esta incursión en el profesionalismo, que no es más que la necesidad de obtener dinero, los directivos del INDER alegaron que la razón esencial era “elevar el nivel de la preparación y la posibilidad de ampliar y diversificar el rango y las características de los oponentes”.